Consumo interno y exportación, los dos frentes para hacer crecer el sector porcino

La cadena agroalimentaria porcina se encuentra en pleno auge con grandes oportunidades y a la vez desafíos. El médico veterinario Jorge Brunori del Grupo Porcino de INTA Marcos Juárez y Guillermo Proietto, gerente de Argenpork comparten su mirada al respecto.Por Agrofy News
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Como dice el refrán: “No hay mal que dure 100 años…” Luego de atravesar un 2018 complicado, con pérdida de rentabilidad y abandono de productores a la actividad, la cadena agroalimentaria porcina parece encontrarse en pleno auge con grandes oportunidades y desafíos. Hay dos frentes: el mercado interno y el mercado de exportación que podrían sostener el crecimiento del sector en los próximos años.

Mirando hacia atrás y repasando el desarrollo del sector porcino argentino, se puede recordar que la época anterior al Gobierno de Mauricio Macri fue de crecimientodebido a las retenciones que el anterior gobierno había aplicado a los granos (insumo en la alimentación del cerdo). Por ejemplo, el maíz tenía DEX del 20%, ROE y había un tipo de cambio de dólar alto que favorecían la rentabilidad del sector.

Al respecto, Jorge Brunori, médico veterinario del Grupo Porcino de INTA Marcos Juárez, dijo a Agrofy News: “Esa exagerada rentabilidad generó una especie de aletargamiento del sector. Si bien crecimos, creo que no terminamos de implementar las medidas necesarias para consolidar ese crecimiento como lo podríamos haber hecho en esa época cuando la rentabilidad era muy alta”.

Para el técnico, los últimos años fueron bastantes más complicados porque se implementaron medidas con el cambio de la visión económica del país de alguna forma afectaron al sector. “La devaluación fue una de ellas, producto de que los granos tienen precio dolarizado y es casi un 70% de lo que cuesta hacer un kilo de cerdo, y en el año 2018, aumentó sobre todo el costo de producción muy por arriba de lo que estaba el precio del capón”, detalló el técnico, y enfatizó: “El productor de cerdos compra en dólares y vende en pesos”.

Para ejemplificar, basta comparar la relación maíz/capón. Según datos de la Secretaría de Agroindustria, en junio de este año, el productor compró 7,33 kg. de maíz con cada kg. de capón vendido, mientras que en 2015 podía comprar 12 kg. de maíz por cada kg. de capón vendido.

HORIZONTE ALENTADOR

En sintonía, y en diálogo con Agrofy NewsGuillermo Proietto, gerente del grupo ArgenPork,apuntó: “El 2018 fue difícil y este año, hay otra situación a partir de la proyección no solo de las exportaciones, sino que la recuperación de los márgenes hace que haya condiciones más propicias como para que la producción aumente”.

Con una mirada más esperanzadora, el técnico del INTA, subrayó: “En 2019, producto del aumento que ha tenido el capón, comienza a acomodarse la rentabilidad y en algunos casos, con alta eficiencia, esa rentabilidad empieza a ser positiva, y en otros, de menor eficiencia o tecnificación, están entrando en un proceso de equilibrio”. Sin embargó, señaló: “Siempre con toda la incertidumbre que estamos teniendo en el país”.

CONSUMO INTERNO Y EXPORTACIÓN

Según los especialistas, las variables que van traccionar el sector porcino son el consumo interno y la exportación. De acuerdo a datos de la Secretaría de Agroindustria, la producción desde enero a junio de este año alcanzó 310.893 toneladas de res con hueso, un 4% más que el mismo período del 2018. Mientras que las exportaciones de este producto crecieron más del 51% en relación al año pasado, alcanzando 9.524 toneladas de enero a mayo, y el consumo por kg/hab/año/ aumentó 1,6% siendo de 15,85 kg.

En este sentido, Brunori resaltó: “El consumo interno viene creciendo a un ritmo del 5% al 8% por año, llegando entre 16 a 17 kg/hab/año y todavía lejos de nuestro techo de consumo que se estima entre 22 a 25 kg dentro de 7 años”. Para el técnico, resulta trascendental “cuidar el consumo interno. Lo cual implica como desafío, continuar mejorando la calidad de la carne de cerdo, y seguir promocionándola”. Por su parte, Proietto señaló: “Todo esto va a depender de la competitividad que la carne de cerdo tenga en precio sobre todo en relación a la carne vacuna”.

El otro pilar de expansión del sector porcino, tiene que ver con el negocio exportador y las condiciones favorables externas que se presentan para colocar carne de cerdo argentina en el mercado global.

Argentina ya superó las 24.000 toneladas exportadas en 2018, y se están destinando alrededor de 8.000 animales por mes a la exportación, es una muy buena noticia”, celebró Brunori y aclaró: “Es más una noticia de mediano a largo plazo porque recién estamos comenzando a ser importantes en exportación”.

En la misma línea, Proietto indicó que “la expectativa de exportación para el 2019 de todo el complejo porcino es de aproximadamente 30.000 toneladas”.

Las condiciones favorables externas, en cierta medida se relacionan con el Gigante Asiático. En sintonía con la inserción inteligente al mundo, cabe recordar que a fines de abril, el presidente Mauricio Macri, anunció la apertura del mercado de China para la carne de cerdo argentina, durante una visita al frigorífico La Pompeya, acompañado por el Secretario de Gobierno de Agroindustria Luis Miguel Etchevehere. Se espera que en el transcurso del 2019 Argentina exporte un total de 18 mil toneladas de este producto al país asiático.

La apertura de este mercado, se trata de una oportunidad única para seguir incrementando las exportaciones de cerdo al mayor consumidor del mundo. Según datos de USDA, en 2018 el consumo interno China superó los 55 millones de toneladas y el consumo per cápita llegó a casi 40 kilos por año. En este sentido, un cisne negro, la Peste Porcina Africana en China,podría reconfigurar el mercado de granos y proteína animal.

Al ser consultado si la epidemia es una oportunidad para Argentina, Proietto explicó: “Aunque nos abre una ventana de desarrollo que la estábamos gestionando antes de que aparezcan estos brotes, es cierto que se potencia la capacidad compradora que tiene China y todo el Sudeste Asiático por este factor”. No obstante, aclaró: “Es un problema. No es bueno que ocurra porque es una enfermedad que afecta a la producción y todavía no se ha desarrollado la vacuna, es altamente contagiosa, se expandió muy rápidamente y eso es un factor negativo para la producción”.

En relación al negocio exportador con China, Argenpork, un consorcio integrado por 18 empresas porcinas, por el momento, cerró un negocio para exportar 300 toneladas de carne de cerdo al Gigante Asiático. “A medida que avancemos en el cumplimiento de los embarques, vamos a seguir ofreciendo y cerrando negocios con China”, indicó el gerente del consorcio.

Actualmente, hay tres plantas frigoríficas habilitadas para exportar a China: Paladini, Campo Austral, y La Pompeya. Estas dos últimas integran el ArgenPork, un ejemplo de asociativismo en el sector. El consorciosurgió con el objetivo de juntarse para trabajar con un grupo de productores, y así desarrollar las exportaciones porcinas logrando tener escala mediante la agrupación. “De lo contrario, solos iba a resultar muy difícil de alcanzar. Con esa unión y cantidad de empresas que forman el grupo podemos llegar a una escala interesante como para ser un jugador en el mercado internacional”, concluyó Proietto.

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