De mantenerse los valores de la reposición, los «feedlots» demorarán sus ventas a la espera de un salto del gordo. Les agregarán kilos para diluir la diferencia negativa con la categoría de invernda.
El alto precio de la invernada obliga a reconfigurar todo el mercado. Los feedlots, con esta relación tan adversa de compra/venta, enfrentarían hoy importantes pérdidas por animal engordado, salvo que el ganado terminado en los próximos meses experimente una suba del 20 al 25 por ciento, lo que por ahora parece poco probable.
Páginas: 1 2