Una nueva maleza se suma a la lista de especies de difícil control

Según los especialistas en Terapéutica Vegetal de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Alejandro Brunori y Eduardo Puricelli, ambas especies pueden confundirse en estado vegetativo y a menudo se encuentran creciendo juntas en los mismos cultivos.

E. tristachya es perenne de ciclo primavero estival y se reproduce a través de semillas y rizomas. Incrementó su importancia en los barbechos en soja y otros cultivos de verano como especie de difícil control en Entre Ríos, San Luis, Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires.

Cespitosa, forma matas densas de 10 a 45 cm de altura (Foto 4). Sus hojas son lineales, plegadas, con su zona ligular pálida, a veces con un mechón de pelitos sedosos y tiene una lígula brevemente membranosa y pestañosa (Foto 1). Posee tallos delgados, tenaces, comprimidos (Foto 2, 3). Su estructura reproductiva está compuesta por espigas en cantidades variables de una a tres, cortas y gruesas, digitadas en la extremidad, con un mechón de pelos sedosos en su inserción (Foto 5).  El fruto es un aquenio utrículo de 2 mm de longitud, grueso, ovoide, de color oscuro.

El artículo de Aapresid agrega que, al igual que E. indica, emerge a mediados de octubre y vegeta hasta mayo, creciendo en los cultivos estivales. El rebrote de E. tristachya comienza a partir de septiembre.

Cuadro: ciclo de vida y descripción botánica de E. tristachya y E. indica

Foto 1. Plántula de Eleusine tristachya (izquierda) y Eleusine indica (derecha)

Foto 2. Planta en estado vegetativo de Eleusine tristachya con 5 macollos (izquierda) y de Eleusine indica con 3 macollos (derecha)

Foto 3. Planta en estado vegetativo pre-reproductivo de Eleusine tristachya con 15 macollos (izquierda) y de Eleusine indica con 13 macollos (derecha)

Foto 4. Planta en plena floración y fructificación de Eleusine tristachya (izquierda) y de Eleusine indica (derecha)

Foto 5. Inflorescencia formada por espigas digitada de Eleusine tristachya (izquierda) y de Eleusine indica (derecha)

Control químico de E. tristachya

Si bien los productores argentinos están familiarizados con el manejo de E. indica, no existe información sobre el control químico postemergente de E. tristachya en distintos estadios de desarrollo.

En condiciones semicontroladas en la facultad de Ciencias Agrarias UNR, Zavalla Santa Fe, se evaluó el control de biotipos de E. tristachya de Entre Ríos y Santa Fe en tres estados de desarrollo (plántula, vegetativo y reproductivo) con distintas dosis de los herbicidas postemergentes glifosato, graminicidas ariloxifenoxi (fop) y cicloheximidas (dim).

  • Con glifosato, el control total de los biotipos en estado de plántula y vegetativo se alcanzó con la dosis de uso (1X=3 L glifosato al 48%), mientras que al estado reproductivo fue necesario 4 veces la dosis de uso, lo que representó 12 L glifosato.
  • Con haloxifop-metil, el control total de los biotipos en estado de plántula se alcanzó con dosis menores a la de uso (1X= 0,12 L al 54%), en estado vegetativo con la dosis de uso y en estado reproductivo fue necesario entre 8 y 16 veces la dosis de uso, lo que representó 0,96 L y 1,9 L de haloxifop-metil, respectivamente.
  • Con cletodim, el control total de los biotipos en el estado de plántula y vegetativo se logró con la dosis de uso (1X= 0,5 L al 24%), mientras que en el estado reproductivo se requirió 16 veces la dosis de uso, lo que significó 8 L de cletodim.

Como conclusión, el control químico de E. tristachya con los herbicidas postemergentes testeados fue posible en estado de plántula y vegetativo con dosis iguales o incluso menores a la de uso (1X). En cambio, en estado reproductivo se requirieron dosis mayores, en forma creciente: 4X con glifosato, 8-16X con haloxifop-metil y 16X con cletodim.

No se determinaron biotipos resistentes ya que todos los biotipos mostraron un comportamiento similar en su control, pero los resultados resaltan su estatus de maleza de difícil control con herbicidas en estado reproductivo.

El uso de sobredosis puede ocasionar riesgos para la salud y el ambiente por lo tanto se recomienda el control en estados tempranos de crecimiento, previo a reproductivo. Para esto es fundamental monitorear los lotes a partir de octubre, cuando comienzan los primeros nacimientos. Combinar su manejo con tácticas no químicas como los cultivos de servicio y labores mecánicas es recomendable.

Con los antecedentes de resistencia de su pariente E. indicia, es clave crear conciencia en el buen manejo de E. tristachya. Además, se espera que su abundancia aumente en el área pampeana en los próximos años.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *