Silvia Correa tiene 49 años y hace una década recorre las rutas argentinas; una historia de búsquedas internas y lucha contra los mandato
Silvia Correa tiene 49 años y una cómoda casa en Buchardo, al sur de la provincia de Córdoba. Sin embargo, muchas veces elige dormir afuera. A metros de su cama, arriba del camión que maneja hace más de una década.
“Acá sos vos, él y la ruta. Si no disfrutás de todo esto no te tenés que subir”, confiesa entre risas. “Él” es un Volkswagen 250, que Silvia bautizó como “La Bestia” y con el que todos los días transporta granos por las rutas del país.
“Nací y me crié en el campo. Manejaba tractores y hacía todas tareas rurales, pero siempre me gustaron los camiones. Tuve la oportunidad y arranqué”, cuenta, orgullosa. En el marco de la presentación de su última línea de camiones, y con la intención de difundir las historias de las mujeres que los manejan, Volkswagen Camiones y Buses la convocó para participar de su stand en Agroactiva 2022 y compartir su experiencia con Agrofy News.
Silvia se dedica al transporte de granos y, aunque ya perdió la cuenta de la cantidad de kilómetros recorridos, asegura que pasa un 80 por ciento de su vida frente al volante. “Empecé con camión propio, un Chevrolet C60, y después seguí como chofer. Ahora ando en un Volkswagen 250 que bauticé ‘La Bestia’ por lo grande que es”, resume.
Sin embargo, con cuatro hijos y tantos días fuera de casa, la vida de esta mujer camionera vacila entre el deseo de continuar con una pasión innata y los reclamos familiares de “una maternidad que se complica”. “Tengo una nena de nueve años, y si no fuese por mis hijos más grandes, no podría estar haciendo este trabajo. A veces me replanteo si esto o mi nena. Quiero hacer las dos cosas a la vez”, confiesa Silvia, en constante lucha contra los mandatos de la sociedad.
“El camión es tu psicólogo. La mochila que uno tiene hay que dejarla abajo porque acá necesitás atención. Acá sos vos, él y la ruta”, insiste. Además, la mujer cuenta que “te adaptás tanto” que hubo veces que con el camión estacionado en la puerta de su casa eligió dormir “ahí arriba” porque le encanta. “Se lleva o no se lleva la pasión”, asegura.
¿Qué significa ser una mujer camionera en Argentina?
En la Argentina cada vez son más las mujeres que se animan a ser parte de un rubro dominado en su mayoría por hombres. Según Ana Laura Zotti, responsable de comunicación y marketing de Camiones y Buses de Volkswagen, hace cinco años, cuando la empresa se empezó a acercar a ellas a través de la agrupación Simplemente Camioneras, eran 60 y hoy ya hay más de 200. “Algunas chicas empiezan porque su papá era camionero y otras simplemente porque les gusta manejar”, comenta.
“Ser camionera es girar la llave y sentir que tu corazón late a la par del motor”, sostiene Silvia. Viaja sola y en silencio. Sin música, ni radio, ni compañía. Solo ella y el camión. “Hay muchas mujeres camioneras. Yo siempre les digo que lo hagan de corazón porque esto no es un juguete”, concluye.