Por Agrofy News
El Gobierno estaría evaluando la posibilidad de aumentar los reintegros a la exportación para compensar el desincentivo que genera el esquema actual de retenciones al procesamiento de soja.
«Es una herramienta que nos parece muy útil para dar competitividad a los exportadores«, destacó el Ministro de Agricultura, Luis Miguel Etchevehere, en referencia a los reintegros a la exportación.
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«Consideramos que no hay que exportar impuestos distorsivos al mundo. Es más caro procesar soja en la Argentina que procesarla en China», comentó Gustavo Idígoras, presidente de CIARA (Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina) y CEC (Centro Exportador de Cereales).
«Tenemos que revertir esta situación, y la única diferencia son los impuestos«, explicó en referencia al esquema actual de retenciones.
«Hablamos todas las semanas sobre este tema. Entendemos las necesidades fiscales que hay, las compartimos y acompañamos ese proceso», agregó. «El Gobierno piensa en reintegros, y nosotros pensamos más en un ajuste de retenciones».
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Tras el acuerdo de protocolo sanitario para exportar harina de soja a China, el titular de Ciara-Cec destacó: «Necesitamos compensar la soja que se nos está yendo sin procesar. En términos comparativos, contra el año pasado creció un 100% la exportación de poroto».
«Queremos generar trabajo en la Argentina y no en China«, comentó Idígoras. Se estima que el complejo sojero emplea más de 345.000 puestos de trabajo directos.
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Miguel Acevedo, presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), se refirió a este tema en la Jornada Nacional del Agro (Jonagro) que organiza anualmente Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).
«Hoy tiene mejor costo exportar poroto de soja que productos procesados«, comentó y agregó: «Hoy, cuando se multiplica por el porcentaje de retenciones, se paga más por la harina o por el aceite, que por el poroto». «Es primarización».
En Jonagro, el titular de la UIA alertó que «cumplimos casi una década de caída en la producción industrial. Necesitamos crecer al 3% durante 13 años para alcanzar el nivel del 2011″.
Algo que es importante dado que «la industria tiene, al igual que el campo, un entramado que abarca a todo el territorio del país».
Además, consideró que la falta de divisas llevó a fuertes ajustes cambiarios y recesivos, «un problema que viene desde hace 40 años».
«Tenemos un sistema financiero similar al de los países más pobres«, alertó y explicó que el financiamiento no llega al 16% del PBI, lo que nos ubica en el puesto 15 de los países que más bajo acceso al crédito tiene sobre un total de 168 relevados.
En este sentido, el desafío es «agregar valor para generar más divisas y que esto se traduzca en más actividad y empleo».
A modo de ejemplo, las exportaciones de cacao generan a los países productores US$ 10.000 millones al año. Mientras que los países que exportan chocolate generan US$ 26.000 millones.
«No es solamente agregar valor, sino agregar tecnología y marca«, concluyó Acevedo.