Argentina experimenta un abrupto cambio de temperatura debido a un intenso viento del sur, marcando un significativo descenso en la humedad y la temperatura en todo el país
Esta nueva condición climática trae consigo estabilidad atmosférica y propicia la formación de heladas en distintas zonas, especialmente en la Patagonia y la zona Pampeana.
Después de semanas dominadas por la humedad, el ingreso de esta masa de aire frío y seco resulta ser una bienvenida alteración para las áreas urbanas y más aún para el sector agrícola. Es vital para la cosecha de cultivos de verano como maíz y soja, que vieron comprometidos su calidad y rendimiento por las previas condiciones climáticas adversas.
Viento, frío y heladas se pronostican para gran parte de Argentina. Las heladas de variada intensidad son particularmente probables en el sur de la provincia de Buenos Aires, La Pampa, y podrían extenderse a áreas de Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos e incluso Uruguay.
La llegada de este aire frío potente no será un evento aislado; se anticipa que durante la semana ocurran al menos dos pulsos adicionales de frío que podrían intensificar y extender el riesgo de heladas a lo largo de toda la franja central del país y mantener bajas las temperaturas en la región patagónica.
Además, las inundaciones en Brasil y la subida del río Uruguay continúan causando estragos, especialmente en Río Grande do Sul y Santa Catarina, con efectos también en Argentina y Uruguay. Se espera que la situación persista en los próximos días, con posibles lluvias y tormentas afectando tanto a Brasil como al norte de Uruguay y al noreste de Argentina.