En 9 de Julio, autoridades nacionales, provinciales y municipales se reunieron para coordinar acciones frente a la crisis hídrica que golpea al centro y noroeste bonaerense.
El avance de las inundaciones en el interior bonaerense encendió las alarmas en todo el arco productivo. Este jueves, funcionarios nacionales y provinciales participaron de una reunión en 9 de Julio para analizar la situación y coordinar respuestas ante una de las mayores crisis hídricas de los últimos años.
Del encuentro participaron la intendenta María José Gentile, el director provincial de Hidráulica Flavio Seiano, el presidente de la Autoridad del Agua (ADA) Damián Costamanga, el administrador de Vialidad Roni Caggiano, y representantes del Ministerio de Desarrollo Agrario y de la cartera de Seguridad bonaerense, junto con una delegación del Ministerio de Seguridad de la Nación encabezada por Santiago Hardie, titular de la Agencia Federal de Emergencias (AFE).
El encuentro se realizó tras los anuncios de la ministra Patricia Bullrich y el jefe de Gabinete Manuel Adorni, quienes confirmaron que el Gobierno nacional destinará fondos y recursos para asistir a las zonas afectadas.

De acuerdo con un relevamiento de la Sociedad Rural Argentina (SRA), el fenómeno ya compromete 3.017.416 hectáreas productivas en la provincia de Buenos Aires.
Los partidos más afectados registran entre 60 y 150 milímetros de exceso hídrico, y las zonas con entre 60% y 100% de agua útil en el suelo abarcan 1.409.223 hectáreas.
Los municipios con mayores niveles de afectación son Adolfo Gonzales Chaves, Laprida, General La Madrid, Saladillo, Roque Pérez, Chivilcoy, Mercedes, San Andrés de Giles, Chacabuco, Benito Juárez, Suipacha y Carmen de Areco, donde el agua cubre amplias áreas agrícolas y ganaderas.
| Indicador | Superficie afectada (ha) | Observaciones |
|---|---|---|
| Exceso hídrico (60-150 mm) | 3.017.416 | Zonas con campos anegados o sin drenaje natural |
| Agua útil en suelo (60-100%) | 1.409.223 | Sectores con saturación de napa y riesgo productivo |
Desde el Ministerio de Infraestructura de la provincia se informó que el encuentro formó parte de la reactivación de los Comités de Cuencas Hídricas, claves para el manejo integral del recurso. El Comité del Río Salado, que abarca nueve subregiones, ya tiene siete activas y trabaja en el Plan Maestro Integral de la Cuenca del Salado, una obra estratégica que permitirá mitigar tanto sequías como inundaciones, alcanzando a 59 municipios y 1,5 millones de habitantes.
El presidente de ADA, Damián Costamanga, señaló:
«Estamos en una situación extraordinaria: ha caído más del doble de la cantidad de agua que debería caer. Por eso, los comités de cuenca son herramientas fundamentales para coordinar las respuestas».
Durante este año, la provincia destinó fondos especiales para mantenimiento de caminos rurales, con una partida adicional de $2.000 millones, y desplegó retroexcavadoras, motoniveladoras, retropalas y camiones para construir terraplenes, defensas y tareas de drenaje. Además, se ejecutaron limpiezas de arroyos, canales y áreas urbanizadas con bombas hidráulicas para descomprimir los cascos urbanos inundados.
Una de las obras centrales del plan hídrico provincial es el Nodo Bragado, que permitirá el drenaje de 2,8 millones de hectáreas del noroeste bonaerense, una de las zonas más comprometidas por el exceso de lluvias.
Las obras previstas para 2026 incluyen ampliaciones de canales y puentes, dragado de lagunas y refuerzo de defensas para garantizar un caudal de 250 m³/s.
| Zona de intervención | Obras principales | Municipios involucrados |
|---|---|---|
| Nodo Bragado | Ampliación de canales y puentes, dragado y defensas | 9 de Julio, Bragado, Lincoln, Villegas, Pehuajó, Casares, Tejedor |
| Cañada de San Emilio | Construcción de colectores Norte y Sur | Lincoln, Viamonte, Daireaux, Tejedor |
| Canal República de Italia | Reparación de terraplenes y obras de control | Región hídrica Área Pampeana Central |
El Nodo Bragado y la cuenca del Salado concentran cerca del 70% de la superficie agrícola, un 20% ganadera y un 10% de producción mixta, lo que refleja el impacto directo de las inundaciones sobre el corazón productivo bonaerense.
Mientras tanto, el campo reclama medidas de alivio fiscal y asistencia directa para productores con pérdidas totales o parciales, mientras se mantienen los anegamientos y cortes de caminos rurales.
Las próximas semanas serán decisivas: si las lluvias persisten, la superficie comprometida podría superar los 3,5 millones de hectáreas, afectando la siembra de maíz y soja de primera y comprometiendo la campaña 2025/26.

