Jornada roja en los granos y presión regional creciente. Con Brasil firme y Chicago en baja, la Argentina vuelve a enfrentar el desafío de sostener competitividad en un mercado global ajustado.
La rueda del 5 de diciembre dejó una señal clara: bajas en soja, maíz y trigo, tanto en Chicago como en el mercado local. El informe oficial mostró un panorama donde la combinación de oferta holgada, expectativas por el WASDE, cierta debilidad en la demanda global y el empuje exportador de Brasil configuran un escenario desafiante para la Argentina, que además debe lidiar con factores internos como retenciones, brecha cambiaria y altos costos logísticos.
En Chicago, el trigo retrocedió ante expectativas de una revisión bajista del WASDE y por las buenas condiciones del cultivo en Francia. El maíz acompañó las bajas, presionado por una oferta global amplia y por las exportaciones brasileñas, que en noviembre alcanzaron 5,03 Mt, un 6,48% más interanual, según el informe. La soja cayó 4,19 dólares, afectada por la incertidumbre en las compras chinas y previsiones de mayores existencias estadounidenses. Para la Argentina, que depende del complejo sojero para la generación de divisas, esta señal no es menor: un mercado más flojo implica márgenes más ajustados, sobre todo con un tipo de cambio oficial atrasado, que el informe ubica en 143.300 pesos por cada USD 100.

En el plano local, los futuros del MATba-Rofex registraron movimientos alineados a la baja, con escasas excepciones. A continuación, las principales posiciones:
Soja – MATba
| Posición | Cierre | Variación |
|---|---|---|
| Dic-2025 | USD 345 | 0 |
| Ene-2026 | USD 342 | -1 |
| Mar-2026 | USD 325,5 | -1 |
Maíz – MATba
| Posición | Cierre | Variación |
|---|---|---|
| Dic-2025 | USD 192 | +1 |
| Mar-2026 | USD 180,5 | -0,5 |
| Jul-2026 | USD 177 | 0 |
Trigo – MATba
| Posición | Cierre | Variación |
|---|---|---|
| Mar-2026 | USD 196,86 | -1,65 |
| Jul-2026 | USD 202,46 | -1,56 |
| Dic-2026 | USD 212,66 | -1,56 |
En un mercado donde Brasil exporta más, China compra menos y Estados Unidos ajusta balances, Argentina enfrenta su propio dilema: cómo competir con países que ofrecen reglas claras, menores cargas impositivas y logística más eficiente. Mientras tanto, puertas adentro, productores y analistas coinciden en que los números se ajustan. «Con estos precios y este tipo de cambio, la ecuación se achica», advirtió un operador rosarino. La industria también pide previsibilidad: «Sin un esquema estable, es difícil planificar agregado de valor y desarrollo industrial», señaló un referente del sector.

La clave, dicen los expertos, pasará por mejorar la trazabilidad, reducir la huella de carbono, promover el agregado de valor y defender mercados estratégicos dentro y fuera del Mercosur. Los precios, por ahora, no ayudan. Y mientras la región acelera, Argentina vuelve a quedar frente a la pregunta de fondo: ¿cómo sostener su peso en el comercio agroalimentario global en medio de un tablero que cambia cada semana?

