La Cámara remarca avances productivos, regulatorios y ambientales que acompañaron el crecimiento del agro y consolidaron una industria clave para la sostenibilidad agrícola.
La Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos (CIAFA) cumple 35 años y celebra un recorrido que acompañó -y en muchos casos impulsó- la transformación tecnológica del agro argentino. Desde sus inicios, la entidad trabajó para fortalecer la nutrición de cultivos, promover el uso responsable de fitosanitarios y consolidar una industria moderna, competitiva y alineada con los estándares globales de sostenibilidad.
| Luis Beconi presidente de CIAFA |
El crecimiento del mercado local es una muestra clara de ese proceso. En la década del 90, la Argentina utilizaba menos de 500.000 toneladas de fertilizantes; hoy supera los 5 millones, reflejo de una adopción sostenida de tecnología, manejo profesional del suelo y herramientas de precisión que permitieron escalar la producción sin resignar cuidado ambiental. En paralelo, el segmento de fitosanitarios también se expandió: de unos 50 millones de kilos comercializados en los años 90, el país pasó a niveles estables de 300 a 400 millones de kilos, impulsado por una oferta más competitiva y accesible que mejoró la rentabilidad de los productores.
La Cámara destaca que este crecimiento fue posible gracias a la articulación público-privada con organismos como Senasa, con quienes trabajó para modernizar registros, actualizar normativas e incorporar nuevas tecnologías como los bioinsumos, ampliando el menú de herramientas para una agricultura más eficiente. «Contar con regulaciones claras y actualizadas es fundamental para el crecimiento de la industria y para promover las buenas prácticas agrícolas«, señaló Luis Beconi, presidente de CIAFA.
Entre los hitos industriales sobresale la instalación de plantas de producción de fertilizantes, como la de urea granulada inaugurada en 2001, además de dos plantas de superfosfato simple en la década siguiente, a lo que se suma la fabricación local de moléculas clave como glifosato y 2,4D, que diversificaron el abastecimiento y mejoraron la competitividad.
La sostenibilidad también se convirtió en un eje estructural de la Cámara. Desde 2005, CIAFA trabaja junto a Fertilizar AC promoviendo la aplicación eficiente de fertilizantes, y fue parte activa de la creación de la Red BPA, que hoy reúne a más de 80 entidades comprometidas con las Buenas Prácticas Agropecuarias. Otro avance clave fue la Ley 27.279 sobre envases de fitosanitarios, que estableció un marco obligatorio de gestión responsable de residuos y marcó un antes y un después en la relación entre producción y ambiente.
En un escenario global atravesado por tensiones logísticas y volatilidad en los mercados de insumos, la Cámara intervino para asegurar la provisión de productos esenciales, promoviendo que fertilizantes y fitosanitarios sean considerados insumos estratégicos para la producción nacional.
Estos 35 años de CIAFA ponen en valor el desarrollo de una industria que acompañó la expansión del agro argentino, impulsó la innovación y promovió estándares más altos de sostenibilidad y profesionalización. «La celebración de este aniversario no solo reconoce los logros alcanzados, sino que reafirma nuestra misión de seguir creciendo y adaptándonos a los desafíos que se presenten«, concluyó Beconi.