La relación insumo-producto cayó, a julio pasado, un 22% y un 16% interanual para el trigo y la soja, respectivamente, lo que implica un beneficio para los productores, ya que necesitan menos producción de esos cultivos para comprar los insumos. Los datos se desprenden de un informe de la Bolsa de Cereales de Córdoba.
Al analizar la compra de insumos, surge que a julio último la relación insumo/producto en trigo y en soja bajó fuerte cuando se la compara con la calculada a igual momento de 2017. Es decir, el poder adquisitivo de estos productos se fortaleció respecto al año anterior.
En maíz y sorgo, en tanto, la relación insumo producto disminuyó un 8%, en promedio, de manera interanual. Sin embargo, el rubro fertilizantes (urea y fosfatos) registró un incremento para ambos cereales en torno al 7%.
El análisis marca que la pérdida de producción en soja y maíz por la sequía elevó los precios en el mercado local, factor que también se trasladó al trigo. La ventaja que presentó el cereal de invierno, al igual que la oleaginosa, fue el de una demanda activa por parte de la industria y exportación, empujando las cotizaciones.
En esa línea, señaló que la relación soja/trigo -que mide cuantas toneladas del cereal se puede comprar con una tonelada de la oleaginosa- el mes pasado fue de 1,3 toneladas, uno de los valores más bajos de los últimos cuatro años.
Situación similar presentó la relación maíz/trigo, que se ubicó en 0,7 toneladas. La relación soja/maíz, en cambio, se encuentra en torno a las 1,8 toneladas, cercano a las 1,9 toneladas promedio de los últimos cuatro años.
ROTACIÓN Y FERTILIZACIÓN PARA EL TRIGO
Teniendo en cuenta la relación insumo producto y el poder adquisitivo entre los distintos granos, la rotación trigo-soja puede resultar favorable en el actual contexto, señala el reporte.
En tanto, la Bolsa de Cereales de Córdoba alertó que el mayor costo financiero que posee elmaíz puede resultar un condicionante en los planes de siembra del productor para la campaña 2018/2019 en un contexto de elevadas tasas de interés.
En el corto plazo, según la entidad, es positiva la posibilidad de potenciar la producción trigueracon refertilización a macollaje.
Córdoba registra un nuevo récord en siembra: más de 1,4 millones de hectáreas sembradas por tercer año consecutivo. Pese al mayor volumen de grano durante las dos campañas precedentes, no se alcanzó los valores mínimos de proteína del estándar de calidad vigente.
«La fertilización oportuna en momento y en cantidad impacta en la comercialización, evitando descuentos por subniveles de proteína, variable directamente relacionada al rendimiento y a la fertilización. Por supuesto, habrá que contar con el acompañamiento de lluvias que permitan la incorporación de los fertilizantes aplicados en macollaje para concretar esta posibilidad de fortalecer la producción triguera 2018/19″, agregó el informe.