La estimación de superficie sembrada con cultivos anuales de cosecha es una herramienta importante para conocer el uso del suelo en la región de influencia de la Chacra Experimental Integrada Barrow. La elección de los cultivos incluidos en las secuencias, son el resultado de las decisiones que debe tomar el productor que integran información sobre condiciones edafoclimaticas, el planteo de rotaciones y aspectos económico-financieros, de la campaña en particular. Si bien durante las últimas campañas, la superficie ocupada con cultivos de cosecha fina ha disminuido, en 2018 se observó un incremento respecto al año anterior, principalmente en los partidos de Tres Arroyos y Coronel Dorrego, asociado al aumento de la superficie destinada a trigo pan y cebada.
Materiales y métodos
Anualmente se realizan recorridas que abarcan en forma proporcional las distintas regiones agroecológicas en las que está dividida la zona de influencia de la Experimental, abarcando los partidos de Adolfo Gonzales Chaves (A.G. Chaves); San Cayetano; Tres Arroyos y Coronel Dorrego (Cnel. Dorrego). Una vez definido el número total de lotes censados, se correlacionan con la superficie útil de cada distrito en estudio. De este modo surge un valor de área que representa la estimación de la superficie sembrada en una determinada campaña. Si bien las cifras logradas no indican con certeza las áreas correspondientes a cada cultivo, dan una aproximación acabada que permite visualizar las tendencias que van ocurriendo en lo que hace a elección de cultivos y tecnología empleada en la región.
Resultados
En 2018 los valores obtenidos mostraron un incremento del área sembrada con cultivos de fina en los cuatro partidos del área de influencia de la Chacra Experimental Integrada Barrow respecto a la campaña anterior, en promedio, un 18% de aumento. El partido de Tres Arroyos presentó el mayor incremento del área destinada a estos cultivos (24%), y el menor, en A.G. Chaves (11%). Al analizar la superficie por partido, Cnel. Dorrego presentó el mayor porcentaje sembrado con fina (47,6% de la superficie apta), seguido por Tres Arroyos con 44,5 %. En A.G. Chaves la ocupación fue del 36,6%, en tanto que en San Cayetano fue de un 35,6%, lo que representó un incremento de 6,2% respecto a la campaña pasada, año en el que la superficie de fina en ese partido había disminuido un 10% respecto al 2016. De las 727642 hectáreas sembradas en toda la región con cultivos de cosecha fina, el 42,8 % correspondió a Trigo pan (Tabla 1), lo que significó un aumento con respecto a la campaña anterior, en la cual este cultivo representó el 37,6% de la superficie destinada a fina. Tres Arroyos resultó ser el distrito de mayor área sembrada (hectáreas) con trigo, siguiéndole en importancia Cnel. Dorrego, A.G.Chaves, y San Cayetano (Tabla 1). En los cuatro partidos, la superficie sembrada incrementó respecto al 2017, siendo Cnel Dorrego el que presentó un aumento muy importante (67%), seguido por A.G. Chaves (35%), San Cayetano (34%), y Tres Arroyos (16%). Cuando se analizó porcentualmente la superficie con trigo pan respecto a la superficie total de cada partido con cultivos de fina (Tabla 2), A.G. Chaves presentó los valores más altos, seguido por San Cayetano, Tres Arroyos y Cnel. Dorrego.
El Trigo Candeal ocupó un 4,7% del área con cultivos de cosecha fina (Tabla 2), lo que significó una reducción del área sembrada respecto al año anterior (9,9% en 2017). Se observó una disminución del área en todos los distritos de la región, principalmente en Cnel. Dorrego y Tres Arroyos. A pesar de esto, el primero sigue siendo el partido con mayor superficie sembrada (Tablas 1 y 2). La Cebada nuevamente fue el cultivo con mayor superficie en la región (47,5%). En los partidos de Cnel. Dorrego y Tres Arroyos fue el principal cultivo de cosecha fina (Tabla 2), ya que representó el 58% y el 48% del área, respectivamente. No obstante, sólo en Tres Arroyos aumentó notoriamente la superficie respecto al año anterior. Al igual que lo ocurrido la campaña pasada respecto a la 2016, en 2018 se observó un incremento del área sembrada con este cereal del 21% respecto a 2017. En esta campaña se volvió a observar un aumento de la superficie dedicada a Avena para grano, producto de aumentos de superficie en Cnel. Dorrego y San Cayetano. En tanto, en Tres Arroyos la superficie se mantuvo estable y presentó una importante disminución en A.G. Chaves. El cultivo de avena ocupó un 5% del área bajo cultivos de cosecha fina de la región, siendo Tres Arroyos el partido con la mayor superficie (Tabla 2). También fue registrada una superficie importante de avena destinada a pastoreo y una menor proporción para la confección de reservas. Teniendo en cuenta los tres destinos, el cultivo de avena, representaría el 13,7% de la superficie total de fina. La superficie de Alpiste fue inferior a la registrada en campañas anteriores, y sólo se lo observó en el partido de San Cayetano, donde ocupó el 0,6% de la superficie de fina. En esta campaña tampoco se registraron lotes de otros cultivos de invierno (como colza, arveja, coriandro, etc) que habían sido observados en años anteriores, lo que favorecería la diversificación de los sistemas.
Consideraciones finales
Las cifras obtenidas de superficie total sembrada con cultivos de cosecha fina mostraron un ligero incremento respecto a la campaña pasada (18% en promedio para los cuatro partidos), siendo este aumento, superior en Tres Arroyos. Si bien el trigo pan recuperó parte de la superficie perdida la campaña pasada, los valores observados distan mucho del promedio histórico de siembra en la región, que oscilaba alrededor del 70%. La cebada continuó siendo, a nivel regional, el cultivo de mayor presencia. Cnel. Dorrego y Tres Arroyos fueron los partidos con mayor superficie destinada a los cultivos de cosecha fina. En cambio, en A.G. Chaves y San Cayetano desde hace varios años la producción agrícola se enfoca principalmente en los cultivos de verano, ya que el porcentaje destinado a cultivos de cosecha fina en estos partidos oscila, entre el 30 y el 35%. Esto advierte un interrogante con respecto al mantenimiento de la sustentabilidad de los sistemas productivos, ya que para esto es de gran importancia el rol de los cultivos de invierno en las rotaciones.
Fuente: INTA por Marina Lucrecia Manso, Martín Sergio Zamora