El trigo y maíz aumentaron de manera interrumpida el área implantada en 5 años. Desde la Bolsa de Comercio de Rosario señalaron que de sembrarse 4,4 lotes de soja cada un lote de gramínea, se espera en la campaña 2019/2020 una relación de 1,75.
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De esta manera el nuevo ciclo marcará un nuevo récord de rotaciones. Desde la Guía Estratégica para el Agro señalaron que la tendencia de subir en un 10% la siembra de maíz temprano respecto al año pasado, cada semana es más firme. Si se logra sembrar todo el trigo que se intenciona, la zona núcleo sumaría más de 250 mil hectáreas con gramíneas en este año.
En un contexto de abundantes lluvias y gran cantidad de agua en las napas, asegura que el incremento en la rotación de cultivos traerá alivio. La BCR sostuvo que volver a rotar el suelo es la práctica más eficiente para producir en forma sustentable y ponerle trabas a los excesos hídricos.
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Además argumentaron que incrementar las hectáreas con trigo y maíz baja el escurrimiento del agua al aumentar la cantidad de rastrojos que queda en el campo. En este sentido manifestaron que también se necesitan más milímetros para su crecimiento y funcionan como bombas de extracción de agua, bajando las napas de la región.
Trigo
La siembra de este cereal avanza pero con complicaciones en algunas zonas por los excesos hídricos. Hasta el momento se alcanzó el 27% del total a implantar. En el caso del sur santafesino se concretó un 35% del área.
La alta humedad ambiental no permite que los suelos se oreen, provocando que la siembra para ciclos largos achique su margen. Aunque se descarta la baja en la intención de siembra. El informe de GEA comentó que muchos productores buscan semilla de ciclos cortos, pero la disponibilidad de semillas podría poner límites a la siembra triguera.