La Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entidades que representan 41% de las exportaciones argentinas, anunciaron hoy que durante el mes de junio pasado las empresas del sector liquidaron la suma de US$ 2.218 millones.
En el mes anterior se habían reportado ingresos de divisas por US$ 2.395 millones, por lo que el ingreso de divisas de la agroexportación registró una merma de US$ 177 en pleno ingreso de la cosecha.
En tanto, en el mismo mes del año anterior el ingreso de divisas fue de US$ 3.833 millones, «cuando se adelantó el ingreso de divisas para contribuir a combatir la inestabilidad cambiaria que se registraba entonces», explicaron. Tiene que ver también con los menores precios de este ciclo, que lograron repuntar durante las últimas semanas.
En cambio, «si se compara la liquidación de junio pasado con el promedio de 2018 (U$S 1.684 millones mensuales), se produjo un incremento del 31,6%», indicaron desde CIARA-CEC.
El monto total de liquidación tendría que aumentar por el mayor volumen de la cosecha este año, que superaría los 145 millones de toneladas, registrando un incremento de 33 millones de toneladas contra el ciclo anterior, fuertemente afectado por la sequía. Actualmente la cosecha presenta un atraso contra los ciclos anteriores, lo que motiva la merma en el ingreso de divisas.
Desde la industria procesadora también atribuyeron la merma a la «tendencia a la primarización que detonaron las medidas adoptadas por el Gobierno el año pasado, por las cuales, además de eliminar el diferencial arancelario para promover la exportación de valor agregado local y empleo doméstico, se consideró a los subproductos industrializados de la soja como si fueran productos primarios, a diferencia del resto de los demás granos».
Asimismo, el monto liquidado desde comienzos de año asciende a US$ 10.718 millones, contra US$ 11.568 a la misma altura del año anterior y US$ 11.378 en junio de 2017.
El complejo oleaginoso-cerealero aportó, el año pasado, el 41% del total de las exportaciones de la Argentina, según datos del INDEC. El principal producto de exportación del país es la harina de soja, que es un subproducto industrializado de este complejo.
COSECHA, EMBARQUES Y VENTAS
En el plano local, desde la Bolsa de Comercio de Rosario destacaron que hasta mediados de la semana la prevalencia de condiciones húmedas en la región núcleo dificultaban el avance de la cosecha. Según el informe semanal de la Secretaría de Agroindustria, para el 26 de junio la cosecha de maíz alcanzaba el 61% de la superficie estimada y la de soja el 96%, en ambos casos el porcentaje más bajo en tres años.
«Para el maíz especialmente, se esperaba que a esta altura del año la trilla estuviese más adelantada atento a las fechas relativamente tempranas de siembra, obligando a ajustar la logística para cumplir con la carga programada de buques para la exportación«, comentaron desde la BCR.
Por otro lado, se destaca el abultado programa de embarque para las próximas semanas. Con lo registrado al día de hoy, según surge de datos de la agencia marítima NABSA, se espera embarcar 4 millones de toneladas en junio y 1,2 millones de toneladas en julio, muy por encima de lo anotado para el mismo período de los años anteriores.
«Con ello, desde el inicio de la campaña se habrían embarcado más de 17,5 millones de toneladas, un récord histórico», destacaron desde la entidad rosarina.
En lo que respecta al complejo soja, desde la BCR destacaron que la carga programada a la fecha para las próximas semanas se encuentra muy por encima de los años previos, coincidente con la relativa mejora de los márgenes brutos de procesamiento en las últimas semanas.
Para el total de la campaña, medido en términos grano-equivalente el programa de embarque del complejo sojero prevé exportaciones por vía marítima por 12,6 millones de toneladas, prácticamente el doble de lo embarcado en los primeros cuatro meses de la campaña pasada pero aún por debajo de los 17 millones de toneladas de la campaña 2015/16.
«En el contexto de un ajuste en la oferta de soja y maíz del Hemisferio Norte, los embarques de maíz y soja desde Argentina y Brasil cobran un renovado protagonismo ante la mayor dependencia mundial de las provisiones sudamericanas. Hoy en día, gracias a los rindes récords obtenidos en la actual campaña la disponibilidad de ambos productos en nuestro país aún se encuentra por encima del promedio de los últimos años, especialmente para el caso del cereal», concluyeron.