Por Agrofy News
Los productores de Estados Unidos vuelven a quedar en medio de la disputa comercial entre el país del norte y China.
Este conflicto, que en varias oportunidades fue definido como uno de los más importantes de la historia, enfrente al mayor productor global de soja (Estados Unidos), con el mayor comprador de la oleaginosa (China). Es por esto que muchas de las medidas afectan directamente a los productores.
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Desde el Ministerio de Comercio chino destacaron un freno a las compras de productos agrícolas estadounidenses y que el gigante asiático no descarta imponer aranceles a las importaciones agrícolas estadounidenses compradas después del 3 de agosto.
«Las compañías chinas relacionadas han suspendido las compras de productos agrícolas estadounidenses«, dijo el Ministerio de Comercio de China en un comunicado en línea publicado poco después de la medianoche en Beijing el martes.
En respuesta al incremento de aranceles que anunció Trump recientemente, China decidió devaluar su moneda, incrementando la tensión en las negociaciones entre ambas potencias.
«LO VOLVERÉ A HACER»
Frente a la amenaza de China, Trump publico en su Twitter: «Como han aprendido en los últimos dos años, nuestros grandes agricultores estadounidenses saben que China no podrá lastimarlos, ya que su presidente los apoyó e hizo lo que ningún otro presidente haría, y lo volveré a hacer el próximo año si es necesario».
Se calcula que las ayudas de Trump a los agricultores sumaron en los últimos dos años un total de US$ 28.000 millones en subsidios.
Donald J. Trump✔@realDonaldTrump
As they have learned in the last two years, our great American Farmers know that China will not be able to hurt them in that their President has stood with them and done what no other president would do – And I’ll do it again next year if necessary!
Además, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, desestimó las preocupaciones sobre una prolongada guerra comercial con China, diciendo que Estados Unidos estaba «en una posición muy fuerte», un día después de que su administración aumentara las tensiones al etiquetar a Beijing como un manipulador de divisas.
El presidente del American Farm Bureau, Zippy Duvall, calificó el anuncio de China como «un duro golpe para miles de agricultores y ganaderos que ya están luchando por sobrevivir».
Por otro lado, el Consejo Nacional de Productores de Carne de Cerdo de los Estados Unidosdijo en un correo electrónico que era importante poner fin a la guerra comercial para que los productores de carne de cerdo pudieran «participar más plenamente en una oportunidad de venta histórica», relacionada con la fiebre porcina de China.
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