Por 
Como pilar de los agronegocios, Santa Fe es terreno fértil para el surgimiento de startups que más antes que después cambiarán las formas de producción. Con el siempre pendiente reto del financiamiento, sigue siendo base de numerosos proyectos que desafían la frontera del conocimiento, aunque lejos están de circunscribir su campo de acción a las fronteras provinciales.
Hiamet, Alytix y Phylumtech son tres de las firmas que en el último tiempo han registrado avances importantes en sus historias de vida, con logros que apuntalan un desarrollo que aunque incipiente no deja de ser prometedor para el sector más dinámico de la economía argentina. Las dos primeras están siendo incubadas en el Parque Tecnológico del Litoral Centro (un ámbito público privado con gran participación del sector universitario), mientras que la tercera es cobijada por el Centro de Innovación Tecnológica Empresarial y Social (Cites) de Sunchales.
La multiplicación de estos espacios de aceleración da cuenta de la mayor preocupación de todos los actores sobre la necesidad de fomentar la innovación, clave para hacer más eficientes los costos y estar en línea con tendencias globales como la mayor preocupación por el ambiente. La creación de Grid Exponential en 2018 es un claro ejemplo de esto: allí participan desde grandes compañías tradicionales -como Vicentín o Bagó- hasta empresarios de la talla de Marcos Galperín.
Ver también: Biotecnología: proyectos argentinos que pueden cambiar la forma de producir
Una de las startups santafesinas que recibió recientemente un importante aporte de Grid Exponential es Hiamet, que tiene sede en la capital santafesina y está desarrollando el primer producto biotecnológico en el mercado de aditivos del biogás. Se trata de una iniciativa con amplia proyección internacional, porque en caso de resultar exitoso estará destinado a un mercado que solo en Europa tiene 12 mil unidades productivas.
El objetivo de la firma es lograr un desarrollo que permita mejorar la eficiencia de las plantas de biogás y así romper con la baja estabilidad de un recurso que existe hace más de 100 años pero es marginal en la matriz energética. El proceso, que se realiza combinando nutrientes con microorganismos especialmente seleccionados, podría dar solución a la falta de infraestructura que sufren amplias regiones del país, donde llevar energía demanda obras de presupuestos complejos.
El fondo de inversión Grid Exponential otorgó recientemente un aporte de 200.000 dólares, que permitirán un aumento del capital de la sociedad, de la que participarán en un 30%. El dinero será destinado a equipar el laboratorio de la firma, que nació a principios de este año como un desprendimiento de Diagramma SA, empresa que desde la capital provincial se especializa en la fabricación de cultivos lácticos para la industria alimenticia.
Braulio Kreczmann, titular de Hiamet, explicó que el tipo de producto al que apuntan no existe en el mercado. «Se utilizan algunos aditivos químicos o biológicos en biodigestores que utilizan fibra, pero nosotros proponemos atacar el segmento global de biogás, con la posibilidad de incrementar entre un 10% y 20% el rendimiento energético», dijo.
De la misma forma que Hiamet, Alytix también es un spin off de Diagramma SA, pero en este caso el objetivo del proyecto es trabajar en la resistencia de los microbios a los antibióticos. La fórmula de la empresa santafesina es utilizar bacteriófagos como principio activo, empleando esos productos para el cuidado de la salud animal y vegetal, entre otras aplicaciones.
“Siempre se utiliza un cóctel de bacteriófagos, porque a veces la bacteria puede ser resistente a uno, pero a otros no”, explicó Marcelo Salama, a cargo del emprendimiento. “Nuestro modelo de negocio es del tipo B2B, la idea es tener un producto (principio activo) para quien lo desee y después que ellos lo vehiculizan como lo crean conveniente”, agregó.
Recientemente, Alytix adquirió un nuevo espacio de trabajo dentro de la incubadora de empresas, ya que han incorporado personal resultado del avance de su proyecto.
PREMIO Y NUEVO DESAFÍO
Otra de las que opera en el mercado farmacológico es Phylumtech, nacida en 2009 como un consorcio público privado bajo incubación del Instituto Leloir, pero luego pasó en 2015 a operar en Santa Fe con la tutela del Cites. Recientemente, la firma se alzó con una de las distinciones en el certamen Innovar, por su sistema ARENA, que consiste en un dispositivo que mide el efecto de fármacos en animales chiquitos, organismos miniatura.
«Básicamente, cuando las farmacéuticas desarrollan compuestos empiezan trabajando en la mesa de laboratorio con experimentos en tubos de ensayo, después se pasa a cultivo de células y por último en ratones. Lo que nosotros hacemos es permitir que esos ensayos se puedan hacer en animales pequeños como insectos o gusanos. Nuestras máquinas permiten hacer estas mediciones automáticamente», explicó Diego Sermonetta, titular de Phylumtech.
Como si ello fuera poco, esta empresa con sede en Sunchales está pronta a lanzar una innovación de lo más disruptivo: se trata de un laboratorio que opera en la nube, una plataforma web donde los usuarios ejecutan acciones que realizan brazos robóticos de Phylumtech. Los resultados de los experimentos llegan luego de manera online. Según entienden desde la firma, esta iniciativa democratiza el conocimiento, ya que permite que no sea necesaria una infraestructura para el desarrollo de proyectos científicos.