Las aplicaciones que se llevaron a cabo con avión, estuvieron a cargo de la Dirección de Producción Vegetal de la Provincia de Corrientes.
Ahora se reanudaron las acciones de monitoreo y control: «Si estamos más comunicados, estamos mejor preparados. Si ves langostas, avisá al Senasa», remarcan.
La Federación Argentina de Cámaras Agroaereas (FEARCA) destacó el trabajo coordinado junto al Senasa.
El aeroaplicador y miembro de la Federación, Guido Kindwerley, explicó cómo se combate esta plaga desde el aire. “Las langostas se asientan de noche en grandes cantidades, en poco volumen de hectáreas, en un radio de entre 5 a 25 ha.”, contó.
Es un trabajo público/privado ya que los ingenieros del Senasa sacan las coordenadas de la ubicación de la manga y se la pasan al aeroaplicador para hacer el tratamiento. El mismo se realiza antes de que salga el sol, cuando la langosta está asentada.
“Hay que organizarse para hacer el tratamiento lo más temprano posible, dejar el avión a full de combustible a la noche para salir antes de que aclare, llegar a un horario que no se muevan porque cuando se mueven ya no hay más oportunidad”, aseguró Kindwerley.
El aeroaplicador explicó que los productos que se utilizan para realizar el control son autorizados y determinados por el Senasa, del mismo modo que las cantidades.