Según los primeros datos, la nueva cepa surgió recientemente y es transportada por cerdos, y está bajo estudio si puede infectar a los humanos.
Infocampo dialogó con Jorge Brunoni, coordinador del programa de porcinos del INTA, quien aportó tranquilidad, principalmente, y también dejó ideas claras, como médico veterinario, sobre aspectos sanitarios.
“Es cierto que las influenzas, por un lado, y los coronavirus, como elCOVID-19, por otro, son todas enfermedades respiratoria que afectan al humano, pero que difieren mucho en su letalidad y mortalidad. Asimismo, este nuevo virus, identificado como G4 y similar a la gripe porcina detectada hace once años, es un primer paso que dan los científicos chinos. No hay alarmarse, sobre todo, bajo un contexto de pandemia”, aclaró.
Agregó que, a pesar de que G4 sea considerado una enfermedad zoonótica, que se transmite de animales a humanos, está muy localizado, por el momento, y aun que resta conocer si esta influenza puede transmitirse entre humanos.
Por su parte, Brunoni también presentó las diferencias entre las influenzas (gripe aviar y porcinas) y el coronavirus COVID-19. “Los coronavirus tiene mucha contagiosidad y menor letalidad y mortabilidad. Las influenzas tienen menor contagiosidad y son más letales y mortales”, dijo.
Entre otros de los aspectos destacados, el coordinador y experto subrayó que estos virus (influenzas y coronavirus) tienen un comportamiento cíclico, cada diez años, que se observan en los diferentes casos.
Desde 2003, una devastadora epidemia de gripe aviar causada por el virus altamente mortífero, el H5N1, ha afectado desde 2003, sobre todo a poblaciones de aves de corral de muchos países de Asia, Oriente Medio, Europa y África.
En el caso de la gripe de la pandemia de gripe A (H1N1), surgió en 2009-2010 y se repitió en épocas pasadas.
De esta forma, queda claro que hay un patrón que se repite, más de 10 años después. Más virus mortal que pasa de animales a humanos.