Agrofy News consultó con fuentes del mercado que señalaron un muy buen volumen de ventas durante mayo y junio, con mucha compra anticipada de parte de los productores. Esto generó que haya una menor disponibilidad en el canal de comercialización y generó la sensación de faltantes. De igual manera, distribuidores aseguran que «no hay dificultades en la reposición».
Lo que sucede es que aparecen situaciones particulares, como la de un formulador local (el más importante de glifosato) que tiene parada la producción por casos positivos de Covid-19 entre su personal. No obstante, existen otras empresas que tienen capacidad para cubrir ese faltante de ser necesario.
En tanto, la industria de agroquímicos advirtió esta semana que las empresas del sector de fitosanitarios que formulan y sintetizan productos localmente ven con preocupación la imposibilidad de contar con los insumos necesarios para producir en sus plantas: «Esto se genera porque las empresas no pueden cumplir con los compromisos asumidos con sus proveedores del exterior, debido a las normativas impuestas recientemente por el BCRA».
Desde el sector industrial advierten que los proveedores no nos quieren embarcar mercadería hasta que paguemos las deudas vencidas: «Hay varias empresas afectadas por este tema y esperan que se resuelva pronto para que no haya un impacto en la producción y comercialización de fitosanitarios», señalan. Cabe destacar que muchas de estas empresas son pymes.
«El faltante no se refleja hoy en el canal. Solo casos puntuales cuyos motivos pueden ser diversos, no solo vinculados a las dificultades que pudo generar la Res. 7030 del Banco Central», agregan desde la Federación de Distribuidores de Insumos Agropecuarios (FEDIA).
Los distribuidores coinciden en que los importadores enfrentan dificultades para realizar pagos al exterior, sumado a que países como China e India han restringido el acceso al crédito para Latinoamérica y especialmente para la Argentina, debido a que aún no cerró la negociación con los acreedores de la deuda externa: «Esa situación abre un signo de interrogante», advierten desde FEDIA.
De igual manera, aclaran que no hay razones suficientes para afirmar que la campaña de la gruesa corre riesgo. Menos aún, en un rubro como los fitosanitarios que, a diferencia de los fertilizantes, presenta más oferta y alta competencia.
Ver también: Cuántos insumos se compran con los precios actuales de la soja, el maíz y el trigo
Desde la Universidad Austral destacan que el agro es un sector fuertemente dolarizado, por lo cual, hubo un impacto sobre el precio, la disponibilidad y las condiciones de financiación del sector decisión del Banco Central de limitar el acceso a dólares para la compra de insumos.
«Los productores han visto alzas en los precios de los insumos, o bien un endurecimiento en las condiciones comerciales», consigna un relevamiento de la Austral que toma como referencia una encuesta a más de 400 productores medianos y grandes.
«También han cambiado las condiciones de financiamiento, con muchos proveedores que venden exclusivamente en dólares y recortaron el financiamiento en tasas en pesos, a la vez que también se limita la disponibilidad en muchos insumos», agregan.
En el relevamiento de junio, la pregunta en cuestión se refirió a las nuevas normas del Banco Central por el control de divisas llevaron a un parate momentáneo de los negocios en dólares: «¿Cuáles de las siguientes situaciones percibe usted?», se consultó a los productores. La respuesta se puede ver a continuación:
En la necesidad de dólares en la economía, también se puso el foco en las liquidaciones de exportaciones, y esto llevó a que los compradores locales -que venían dando la posibilidad de no “pesificar” los negocios de grano entregados mientras pudieran manejarlo- comenzaran a pedir el cierre del tipo de cambio.
Esta situación también tuvo efecto sobre la comercialización de insumos, ya que ante la disponibilidad momentánea de pesos los productores apuraron la compra para la campaña 2020/21.
En el Especial Maíz de la nueva campaña el consultor Teo Zorraquín, de Zorraquin+Meneses (Z+M), adelantaba que la medida que implementó el Banco Central generó un aumento en dólares de los insumos que podría impactar sobre la estructura de costos: «Esto dejó a la UREA y al Fosfato Diamónico con precios por encima del anterior a la Circular».
Del otro lado, el «antídoto» para esta amenaza es la posibilidad financiar la compra de insumos a través de las tarjetas agro con tasas inferiores al 25 – 30% anual. Lo que se busca es poder pesificar la compra para quedar «apalancado» frente a cualquier variación del tipo de cambio. Y aquí otra alternativa son los cheques.
Argentina alcanzó un record de consumo de fertilizantes en el año 2019: 4,6 millones de toneladas. «Dos terceras partes del consumo en nuestro país provienen de la importación», destaca un relevamiento de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
En las últimas tres décadas, el consumo de fertilizantes se incrementó más de 10 veces, pasando de 300 mil toneladas en el año 1990 a 4,6 millones toneladas en el año 2019, según información de la “Cámara de la Industria Argentina de Fertilizantes y Agroquímicos” (CIAFA).
La Austral concluye que el cambio en las alícuotas de retenciones, más el desdoblamiento cambiario que encarece mucho la dolarización de la liquidez, y finalmente las últimas medidas respecto a la restricción de compra de dólares para importación, que deterioran el precio y las condiciones comerciales para acceder a insumos, implican un ajuste severo en los márgenes y el negocio de los productores en términos generales.