El ing agr Raúl Esteban Candela explica que los ensayos buscan responder a una demanda territorial de desarrollar herramientas para el manejo sustentable de cultivos extensivos y lotes periurbanos. Cabe destacar que el estudio se enmarca en el proyecto: «Desarrollo de sistemas productivos para áreas de amortiguamiento e interfases urbano/periurbano-rural que promuevan el resguardo ambiental y la producción de calidad«.
Moha: ensayos de cultivos de servicio
Los ensayos, que aseguran son inéditos a nivel mundial, evaluaron la aplicación de moha (Setaria itálica) sobre soja en pie como cultivo de servicio en la región centro norte de la provincia de Córdoba.
Candela señala que durante los dos primeros años de experimentación (2019 y 2020), el crecimiento de la moha no interfirió con la cosecha de soja. En esta última campaña (2021) las excelentes condiciones ambientales para el crecimiento inicial de la moha hicieron que al momento de la cosecha de soja las puntas de las hojas de la gramínea fueran dañadas por el cabezal de la máquina y hubiera algo de aporte de materia verde húmeda en la cosecha.
Con altas densidades de siembra al voleo de moha sobre soja en estados reproductivos avanzados se están consiguiendo valores de materia seca de moha iguales o superiores a 2000 kg/ha (2019 y 2020). En tanto, la supresión de malezas otoño invernales en las parcelas con el tratamiento de moha sobre soja durante los dos primeros años de evaluación fue superior al 90% con respecto al testigo.
«No ha habido problemas de relevancia con plagas de insectos ni enfermedades en la moha que generaran disminución de plantas, disminución de área foliar o pérdida de parte aérea», agrega el especialista.
En este sentido, desde el INTA Jesús María enumeran las principales conclusiones del ensayo con moha:
- Altas densidades de moha sembradas sobre soja en estados reproductivos avanzados mostraron hasta el momento buen desempeño en el control de malezas comunes en el centro norte de Córdoba.
- A su vez se consigue una aceptable cantidad de materia seca de cobertura en poco tiempo sin necesidad de secado mecánico o químico, y sin resignar recursos para la soja ni para el cultivo posterior.
- Se debe ajustar la fecha de siembra para no generar inconvenientes en la cosecha de la soja, lo que depende de varios factores entre ellos las condiciones ambientales entre siembra de moha y cosecha de soja.
- Se deben continuar evaluando fechas de siembra, estado fenológico de la soja al momento de la siembra del CS, densidades de moha, cultivares de soja más adecuados para esta práctica, maquinaria para siembra, efecto supresor sobre distintas malezas, etc.
Avances y datos preliminares de tres años de ensayos inéditos de uso
de moha como cultivo de servicio. INTA Jesús María – PIT Centro
Candela, Raúl (INTA – AER Jesús María)
Introducción
Los cultivos de cobertura son aquellos que se realizan entre dos cultivos de renta, los
cuales comúnmente se realizan con el fin de “cubrir” el suelo de manera de controlar la
erosión. Sin embargo, debido a diferentes externalidades que se generan se piensan
como cultivos que contribuyen con servicios ambientales como el secuestro de carbono,
la regulación del reciclaje de nutrientes y del ciclo hidrológico (INTA Paraná, 2019), el
control de malezas resistentes (Aapresid, 2017) y la reducción del uso de herbicidas,
fundamentalmente en ámbitos periurbanos (INTA Marcos Juarez, 2017-2021), y además
la provisión de forraje. Por tal razón, actualmente se conoce a los cultivos de cobertura
además como “cultivos de servicio” (CS) (INTA Paraná, 2019).
Durante la campaña 19/20 el total sembrado de estos cultivos a nivel país fue de 352 mil
hectáreas, lo que equivale al 1,8% de superficie sobre las 19,5 millones de hectáreas con
los cultivos de gruesa mencionados previamente. Los valores más altos se observan en el
sur de Córdoba con 86.900 hectáreas sembradas, seguido de Entre Ríos donde se sembraron
58.700 ha de cultivos de cobertura (ReTAA, 2021).
Desde el año 2019, y a raíz de la problemática emergente de las limitaciones de
producción agrícola en ámbitos periurbanos, y en un excelente proceso de trabajo
participativo de extensión agrícola con productores, técnicos e investigadores, INTA Jesús
María conduce ensayos de CS con el objetivo de evaluar el uso de moha (Setaria itálica)
en siembras de fines de verano-principios de otoño y sobre cultivo de soja, para el
control de malezas, la producción de materia seca como cobertura en siembra directa y
su aporte a la sustentabilidad del sistema productivo en el centro norte de la provincia de
Córdoba. La idea original es del Sr. Mario Delprato, consejero de la AER Jesús María.
En un trabajo absolutamente inédito, ya que la bibliografía sólo cita a la moha en sus
distintos usos, sembrada en sus fechas de verano y sólo entre cultivos sucesivos, la
hipótesis que se plantea es que esta técnica de siembra otoñal de moha (fuera de fecha
óptima) sobre soja permitiría anticipar la siembra de CS para aprovechar las
precipitaciones de otoño que la soja no utiliza por estar finalizando su ciclo, alcanzar
coberturas similares a otros CS contrarrestando el escaso rastrojo que deja la soja,
entrar en competencia temprana con las malezas otoño-invernales, disminuir el consumo
de agua que es un recurso sumamente crítico para la producción otoño invernal en el
norte de Córdoba, permitir una buena recarga del perfil para la siembra del cultivo estival
posterior, y disminuir el uso de agroquímicos por el control natural que ejerce el CS
sobre las malezas y porque, a diferencia del resto de los CS que deben ser secados con
herbicidas o rolados, la moha se seca naturalmente por acción del frío invernal.