El uso de semilla con tecnología Bt alcanzó el 23% del área. En cuanto a la nutrición, tomando de referencia una de las principales fuentes utilizadas en el cultivo, se aplicaron 73 Kg de superfosfato simple por hectárea a nivel nacional. En la campaña 2020/21 se sembraron 16,9 MHa del cultivo de soja, lo que mostró una reducción de 200 mHa con respecto a la campaña 2019/20 y una caída de 6% con respecto al promedio de las ultimas 5 campañas. A su vez, el rinde promedio nacional fue de 26,8 qq/Ha, lo que reflejó una caída del 9% en comparación a la campaña anterior. Esta disminución se debió principalmente a las escasas e irregulares precipitaciones durante los meses de febrero y marzo mientras el cultivo atravesaba su período crítico.
El ReTAA considera que el Nivel Tecnológico refiere a un concepto amplio que incluye tanto la utilización de insumos como las prácticas de manejo empleadas. De la conjunción de estos dos aspectos surgen tres niveles tecnológicos diferenciados. En la campaña 2020/21 los asesores fueron indagados acerca de las variables que caracterizaron la tecnología en el cultivo de soja.
Las variables que tuvieron mayor preponderancia fueron la fertilización y la biotecnología. En lo que respecta al manejo, los más mencionados fueron siembra directa, fecha de siembra, aplicación variable de insumos, densidad de siembra y monitoreo del cultivo. Basado en los parámetros mencionados anteriormente, se obtuvo una adopción de tecnología de 34% de nivel Alto, 62% de nivel Medio y 4% de nivel Bajo. El gráfico 1 muestra estos niveles de adopción a lo largo de las últimas diez campañas agrícolas, reflejando un estancamiento en el paquete tecnológico utilizado en el cultivo.