Esta alianza de trabajo ya que cumple 10 años y recopila numerosas experiencias exitosas como el de la Chacra Pergamino, el caso emblema de esta articulación que compartió sus resultados positivos a partir de tecnologías de la agricultura sustentable.
Roggero destacó el rol del Sistema Chacras por “generar conocimiento científico para responder a la demanda del productor y el desarrollo local mediante el agregado de valor. Para esto fue fundamental unir al productor con la ciencia y generar conocimiento de rigor científico”.
A su turno, Mirassou mencionó que, “el Sistema Chacras fue y será un camino que facilita y ayuda a cumplir con los objetivos de aportar a la competitividad, a la salud ambiental y a la equidad, que están nuestro Plan Estratégico Institucional”.
Nuevo ciclo
A partir de la firma de este nuevo convenio de cooperación entre el INTA y Aapresid, comienza el tercer ciclo de trabajo del Sistema Chacras con nuevos objetivos y ejes de trabajo que tiene como faro a la sustentabilidad de los sistemas.
El trabajo articulado en la Chacra Pergamino dio sus resultados y demostró que es posible armonizar la producción agropecuaria con la naturaleza por medio de prácticas sustentables.

La nueva etapa constará de tres ejes conductores e interrogantes centrales a responder relacionados con la biología del suelo, el balance de carbono y agua y el impacto ambiental.
- ¿Qué indicadores explican la salud y evolución biológica de un suelo?
- ¿Cómo generar un sistema de Carbono Neutro donde podamos demostrar mayor productividad y eficiencia en el uso del agua?
- ¿Cómo medimos el impacto ambiental sobre los sistemas actuales?
Para responder estos interrogantes, está conformada una mesa de expertos integrada por Luis Wall de la Universidad Nacional de Quilmes-CONICET; José Bedano de la Universidad Nacional de Río Cuarto-CONICET; Lucas Garibaldi de la Universidad Nacional de Río Negro-CONICET; Luis Milesi, Andrés Llovet, Horacio Acciaresi, Ana Clara Caprile y Alfredo Cirilo, del INTA Pergamino.