Las consecuencias de la sequía se siguen derivando en diversas situaciones en el campo, como el creciente temor por el futuro cercano en actores claves de la actividad. Entre ellos, los contratistas rurales, prestadores de servicios responsables de recolectar el 70% de la cosecha con máquinas de última tecnología y alto valor que, en muchos casos, deben terminar de pagar con créditos.
Hace unas semanas, la Federación Argentina de Contratistas de Máquinas Agrícolas (Facma), que agrupa a 4000 de los 10.000 de estos actores que hay en el país, visitó a funcionarios de la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo que conduce José Ignacio De Mendiguren. Pidieron que prorrogará, para el final de los créditos para compra de maquinaria, una cuota que vence estos meses. La explicación es que, con poca cosecha, hay poco para cobrar y afrontar los compromisos.
Sin respuesta. “Nos iban a convocar (luego de esa reunión) y no tuvimos respuestas; no quedan ganas de seguir insistiendo”, señaló al diario La Nación, Jorge Scoppa, presidente de Facma. Pasaron los días y, como explicó Scoppa, no hubo avances ni respuesta a ese pedido por parte de las autoridades nacionales.
Por tal motivo, hay preocupación en la actividad y Luis “Fredy” Simone, contratista bonaerense y socio de Facma, manifestó su angustia por la situación en una carta difundida en redes sociales.
“Una vez más, sin respuestas a nuestra problemática, una vez más, siendo ignorados por el poder político, en general. Hoy particularmente nos toca con este gobierno, pero nos ha tocado con otros también. Nunca fuimos visibilizados; es triste golpear puertas explicando nuestra problemática y que nadie nos dé una solución”, expresó.
Incapacidad. También apuntó a la “incapacidad” de los políticos para atender a un sector estratégico para que se pueda desarrollar la producción agrícola.
“El desconocimiento hacia nuestro sector habla, en parte, de la incapacidad de los políticos en sus funciones; habla de no saber en absoluto lo que representamos, de ningunear de alguna manera la actividad del contratista. Cuando en realidad fuimos, somos y seremos un eslabón imprescindible y de suma importancia para la producción agropecuaria del país”, enfatizó.
En otro fragmento de su misiva, Simone se focalizó en la situación generada por la sequía, que impactó de lleno en los contratistas quienes, además de prestar un servicio de siembra y cosecha, también suelen realizar su propia producción.
Sin prevenir. “Lamentablemente, así transcurren los meses, tocando puertas sin ninguna respuesta, sin contestación ni solución a nuestro pedido; ya veníamos vaticinando los problemas que se iban a dar por la falta de cosecha, siembra y demás labores”, dijo.
“Una vez más, los políticos hacen ‘oídos sordos…ojos ciegos’, una vez más ignorando la producción, una vez más rascándose para adentro como si acá no hubiera pasado nada”, agregó el contratista.
Sobre el final, remarcó otros problemas, como los insumos. “De la misma manera pasó con el gasoil y con los neumáticos, con el tránsito agrícola y un montón de cosas más que venimos planteando desde hace años y años. Esto se anticipaba y hubo cero prevención; dejan que todo explote en las manos de cada uno de nosotros”, indicó, y finalizó diciendo: “Señores, da lástima que sean tan ineptos”.