El Gobierno introduce modificaciones en los parámetros de distribución de la cuota Hilton, destinada a la exportación de carne vacuna de alta calidad a la Unión Europea.
Mientras busca brindar previsibilidad a operadores con trayectoria, algunos expertos advierten sobre posibles efectos de concentración en el negocio y la habilitación de transferencia de volumen entre empresas.
Una resolución recientemente publicada en el Boletín Oficial ha generado reacciones encontradas en la industria frigorífica exportadora. El Gobierno establece nuevas condiciones para acceder a la cuota Hilton, un contingente arancelario para exportar carne vacuna de alta calidad a la Unión Europea y el Reino Unido. Si bien se busca proporcionar previsibilidad a los operadores con trayectoria, algunos analistas expresan preocupación por la posible concentración del negocio y la inclusión de la cuota en un criterio de rendimiento pasado que podría no favorecer la diversificación de mercados.
La resolución también abre la puerta a la transferencia de cuotas entre empresas, lo cual ha generado polémica y críticas. Algunos argumentan que esto podría permitir que empresas vendan el beneficio de tener un arancel más bajo para ingresar al mercado europeo. Expertos señalan que esto podría resultar en una concentración del negocio en manos de unos pocos actores principales, en detrimento de aquellos que buscan diversificar sus mercados.
El cupo Hilton ha sido una herramienta para estimular las exportaciones de cortes de alto valor fuera de la cuota, pero con estos cambios, se considera parte del rendimiento exportador, lo cual podría desalentar la diversificación y asegurar el reparto entre los actores tradicionales.
Además, se permite un aumento de hasta el 20% en la asignación de cuotas a aquellos que hayan sido adjudicatarios en los últimos cuatro ciclos comerciales, lo que ha generado críticas por privilegiar a los actores tradicionales y limitar las oportunidades de otras empresas.
Uno de los aspectos más controvertidos es la posibilidad de transferir cuotas entre empresas, algo que anteriormente estaba estrictamente prohibido. Expertos consideran que esto puede tener un impacto negativo al permitir el «vender» el beneficio de pagar aranceles más bajos a otras empresas, lo que podría concentrar el negocio y limitar la competencia.
Estas modificaciones han generado un intenso debate en la industria frigorífica exportadora y se espera que continúe la discusión sobre las implicaciones de estos cambios en el mercado de exportación de carne vacuna hacia Europa.