Victor Tobin, experto considerado por muchos como «el rey del sorgo», habla sobre lo que necesita este cultivo para poder marcar una real expansión. «Hay mucho desconocimiento sobre el manejo», advierte. Además, se viene un simposio nacional.
Entre otras virtudes, el sorgorepresenta menores costos, mayor seguridad y potencialidades de producción equivalentes en comparación con el maíz, lo que abre una gran perspectiva de crecimiento del cultivo aplicado a la producción ganadera.
Pero también, durante las últimas temporadas, el híbrido granífero se readecuó para ser implantado en zonas netamente agrícolas, debido a que a lo largo del tiempo fue demostrando su rusticidad para enfrentar el clima adverso de las últimas tres campañas.
Y se trata de un cultivo que, además, para el próximo ciclo genera gran interés, a raíz de la decisión de muchos productores de desistir de la siembra de maíz, como consecuencia de los daños de la chicharrita.
En este contexto, el ingeniero agrónomo Víctor Tobin, referente del cultivo y fundador del histórico semillero Tobin SA, empresa que hoy se encuentra en manos de RAGT Argentina y de la cual es asesor superior, advirtió que si bien el sorgo tiene una oportunidad sin límites en las rotaciones de los productores, es importante mejorar su manejo.
EL SORGO, EN EL CAMINO DEL CRECIMIENTO
“Como ocurre con todos los cultivos, el manejo es una pata fundamental del éxito productivo del sorgo. En nuestro país hay mucho desconocimiento sobre eso y se convierte en una limitante que debemos revertir”, sostiene el experimentado especialista, quien con 80 años de edad, se muestra con confiado al hablar de las oportunidades que avizora el cultivo.
“Hoy vemos en el sorgo una oportunidad para incluirlo en las rotaciones, como una alternativa al maíz, principalmente debido al problema que genera el spiroplasma”, cuenta Tobin, aunque sostiene: “Es una pena que se tenga que implantar sorgo en detrimento del maíz, ya que históricamente debe ser un complemento para las rotaciones agrícolas”.
No obstante, destaca que el sorgo hace 3 campañas viene con un notable crecimiento. “Fue ganando hectáreas en zonas agrícolas por excelencia porque es un cultivo mucho más rústico que el maíz y se comporta mejor a la sequía”, comentó.
Según el referente, desde el norte bonaerense hasta el sur de Santa Fe, el cultivo fue introduciéndose en las rotaciones, no sólo por las tecnologías que facilitaron la producción de este cultivo, sino también porque el mercado chino fue demandando el grano desde la firma del protocolo en 2014.
“Junto al INTA, CREA y otras entidades fui parte del equipo de Maizar que trabajó para la firma del protocolo con China, que fue un pasaporte importante para comenzar a negociar el sorgo en ese país. Creo que este camino ayudó para ser considerado por los productores y sume desde ese momento más de un millón de hectáreas”, destacó.
SORGO: LO QUE FALTA APRENDER EN EL MANEJO
“Es clave comenzar a pensar en un manejo eficiente del sorgo. Debemos saber que por más buena que sea la semilla, con la mejor tecnología disponible, no tendrá el efecto deseado si no aplicamos un manejo óptimo desde la siembra del cultivo”, destacó Tobin.
En ese marco, enumeró a la densidad de siembra, el tipo de campo, la nutrición del suelo, como factores claves que determinan el éxito del sorgo en cualquier planteo de producción.
“El sorgo es un cultivo fundamental para diversificar el sistema agrícola en situaciones normales, pero siempre con buen manejo”, indicó.
Respecto a eso, dijo que el productor todavía tiene que aprender mucho sobre la densidad del sorgo.
“Desde chico observé a los productores que tenían un slogan muy particular; ellos decían que para ganar una batalla había que tener soldados, es decir que si quería obtener rindes en sorgo era necesario tener muchas plantas. Hoy nos damos cuenta que ese mito es falso”, dijo convencido.
Según Tobín, es bueno lograr muchas plantas por metro, pero “no más de las necesarias”. “Me cansé de recorrer lotes de sorgo en Uruguay, Entre Ríos y otras provincias, donde se sembraban 14 y 15 kilos de sorgo por hectárea. Una densidad muy extravagante en relación a lo que se recomienda hoy”, comentó.
No obstante, remarcó que existe una limitante. “No hay mucha tecnología en sistemas de siembra para hacer una implantación óptima de sorgo. Se puede calibrar la maquina a medias, pero eso significa que donde iba 1 semilla caen 2”, sostuvo.
Y apuntó: “Son desafíos que todavía tenemos pendiente para comenzar a implantar el sorgo considerando granos por metro y no kilos por hectáreas”.
SORGO: LA VUELTA DE LOS SISTEMAS MIXTOS
En otro orden de cosas, el entrevistado le abrió una oportunidad a la vuelta de los sistemas mixtos en el campo con el aporte del sorgo.
“El 60% de la agricultura argentina está en manos de empresas, grandes pooles de siembra a quienes no les interesan los sistemas mixtos; sin embargo, los productores que no desarmaron sus estructuras se dieron cuenta que hoy, sumar ganadería, es una correcta opción”, expresó.
Es por esa razón que desde la compañía RAGT lanzaron Posta Ganadera, un servicio que fomenta la importancia de los sistemas mixtos.
Es un espacio de encuentro entre productores, técnicos y actores vinculados a la alimentación animal, quienes comparten información sobre el uso eficiente del pastoreo directo y los forrajes conservados.
“Se trata de un espacio de intercambio y asesoramiento profesional sobre qué híbridos son los recomendados según los requerimientos nutricionales por etapa productiva”, expresó Tobin sobre su funcionalidad.
Cuando se apunta a materiales de mayor o menor porte, mayor o menor cantidad de granos, se busca dirigir la dieta hacia más fibra o más cantidad de energía. Es decir que se busca una planta que tenga un grano grande y un buen equilibrio entre el tamaño de la panoja y la cantidad de planta para aprovechar fibra y energía.
“La elección comienza desde que vemos la planta hasta que me imagino cómo va a ser digerido ese material. Antes de elegir el material tenemos que pensar quién y cómo lo va a comer y con qué objetivo se lo estamos dando de comer, según lo que queremos que produzca”, cuenta el referente.
Los objetivos de Posta Ganadera son la optimización de recursos para un mejor rendimiento productivo. La clave es la elección exacta del producto que se necesita según la categoría animal, la región agroclimática, la época del año, las características del campo y la programación de la dieta.
SIMPOSIO NACIONAL DE SORGO
En tanto, durante los días 21 y 22 de agosto, la sede Pergamino de la Universidad Nacional del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires (Unnoba), será lugar del V Simposio Nacional de Sorgo y III Conferencia Internacional de este cultivo.
Se trata de una actividad organizada en forma conjunta por el INTA, la Asociación de Ingenieros Agrónomos del Norte de la Provincia de Buenos Aires (AIANBA) y UNNOBA.
Los ejes temáticos girarán en torno al cambio climático y el escenario que ofrece este cultivo para aprovechar ciertas condiciones del suelo y del ambiente. También aspectos referidos a la comercialización y el interés que despertó el sorgo en los mercados internacionales.
Además, se discutirá aspectos vinculados al manejo del cultivo, mejoramiento genético y tolerancia a herbicidas, enfermedades e insectos. También se actualizarán conceptos en relación a una plaga de reciente aparición en Argentina y que ha tenido una rápida respuesta por parte de los semilleros.
Se trata de un encuentro abierto a todos aquellos que quieran participar de las instancias del Simposio que tendrá modalidad presencia y virtual. Los interesados podrán inscribirse de manera gratuita a través del correo electrónico: simposionacionaldesorgo@gmail.com.