El Campo propone al Gobierno una baja importante de retenciones
El campo argentino ha propuesto al gobierno una significativa reducción en los derechos de exportación, conocidos también como retenciones. La solicitud radica en bajar las retenciones del 33% al 25%, en un esfuerzo por incrementar las reservas y compensar el desplome de los precios internacionales. Esta medida ha sido uno de los temas de mayor preocupación y expectativa en el sector agropecuario, especialmente después de las declaraciones del Ministro de Economía, Luis Caputo, en la Bolsa de Cereales.
Durante su discurso en el aniversario de la Bolsa de Cereales, Caputo enfatizó la necesidad de mostrar resultados de superávit fiscal antes de reducir cualquier tipo de impuestos. Sin embargo, dejó una puerta abierta al pedir a los empresarios confianza en que eventualmente se reducirán las cargas impositivas. Este llamado a la inversión por parte de Caputo fue reforzado al señalar el rol protagónico de los empresarios en la recuperación económica del país.
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Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara Argentina de la Industria Aceitera y del Centro de Exportadores de Cereales (CIARA-CEC), expresó su optimismo ante la posible baja de retenciones. Según Idígoras, una reducción de 8 puntos en las retenciones podría generar un ingreso adicional de 5 mil millones de dólares, una cifra considerable en el actual contexto de reservas negativas del Banco Central.
El sector agropecuario sostiene que, con los actuales precios internacionales, una reducción en las retenciones podría mejorar los ingresos de los productores en un 7%, además de incrementar la producción de granos de 50 a 61 millones de toneladas. Adicionalmente, Idígoras subrayó que mientras la minería y la energía tardarán años en aportar divisas, la soja es capaz de resolver la ecuación de divisas de manera inmediata. Según sus proyecciones, los ingresos por exportación de soja podrían pasar de 18,500 millones de dólares actuales a 24,000 millones el próximo año.
En conclusión, la expectativa de una baja en las retenciones sigue en pie, pese a la cautela del gobierno centrada en la estabilización macroeconómica. El sector sigue insistiendo en la necesidad de esta política para mejorar las reservas y garantizar estabilidad económica. A pesar del optimismo, las autoridades se mantienen prudentes, priorizando antes alcanzar un superávit fiscal.