La agrupación ruralista solicitó “medidas e incentivos en varias producciones”; alertó sobre la situación climática
En medio de la preocupación por el clima que comenzó a demorar la siembra de la campaña 2024/2025 en algunas regiones, la Mesa de Enlace pidió aliviar la carga fiscal del sector agropecuario. En la primera reunión con la participación de la nueva presidenta de Federación Agraria Argentina (FAA), Andrea Sarnari, los dirigentes reiteraron este jueves que los productores agropecuarios necesitan medidas para bajar la presión fiscal que tiene actualmente el agro.
“Se trabajó en la definición de los temas de la agenda con la que la CEEA -Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias- trabajará en adelante, que incluye temas relevantes para el campo y la sociedad en general. Entre ellos, los presentes destacaron tres ejes centrales: la discusión sobre los derechos de exportación, la agenda 2030 y a la identificación electrónica individual, entre otros”, precisaron a través de un comunicado.
La Mesa de Enlace está compuesta por el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino; el presidente de Coninagro, Elbio Laucirica; el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Carlos Castagnani, y, por Federación Agraria Argentina (FAA), Andrea Sarnari.
En ese sentido, los presidentes, además, analizaron con preocupación la situación climática que viene azotando a varias provincias y la baja de los precios internacionales, que van en desmedro del esfuerzo, destacaron, que los productores agropecuarios llevan adelante en el interior del país.
“Desde las entidades estamos seguros de que necesitamos medidas e incentivos en varias producciones, así como también un alivio fiscal en general, porque no puede persistir esta carga fiscal que nos asfixia. Urge que desde el Gobierno se acompañe al sector para generar mejores condiciones, principalmente para la próxima cosecha”, sintetizaron.
Castagnani señaló que desde la entidad han enfatizado la necesidad de implementar un esquema de reducción gradual de retenciones para aliviar la carga fiscal que enfrentan los productores rurales. Según manifestó el dirigente, la situación actual, marcada por la baja de precios internacionales y el aumento de los costos productivos, hace urgente una revisión de estas medidas fiscales. “Las retenciones son un impuesto injusto, afectando la capacidad de los productores para invertir en tecnología y continuar con la siembra”, precisó.
Además, el dirigente agregó que, si bien existe una intención por parte del gobierno de eliminar las retenciones cuando la situación económica lo permita, consideró que esto no es suficiente. Puntualizaron que urge la necesidad y la definición de un cronograma claro para la reducción de estos impuestos, buscando un camino que permita sostener la producción y asegurar la viabilidad del sector a largo plazo. “La postura de CRA también incluye un llamado a ajustar otras medidas tributarias que afectan la competitividad de los productores, especialmente en regiones con desafíos climáticos severos y las economías regionales”, dijo.
En tanto, Laucirica agregó que se hace necesario, ante esta situación, medidas que traigan alivio fiscal al productor. “En este sentido, sería importante un incentivo a través de medidas fiscales como las previstas en los proyectos de ley como es el Régimen de Inversiones para el Desarrollo Agroindustrial (RIDA)”, puntualizó.
Por último, Sarnari, afirmó: “La rentabilidad en varias producciones es negativa, de algún modo, hay que ayudar al productor. El alivio fiscal requiere de esfuerzo, pero también sabemos que impactaría positivamente para que podamos producir mejor, más y sostener nuestro sector que tiene pocas espaldas”.
Añadió que las retenciones “impactan negativamente y que, además, no vuelven en infraestructura, créditos blandos u otras formas de desarrollo”. Sobre su primera reunión con la Mesa de Enlace, dijo: “Fue una reunión de trabajo y de diálogo constructivo, me hicieron sentir muy bienvenida”.
Estimaciones
De acuerdo con un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), las últimas lluvias no han sido suficientes para revertir un panorama difícil para el trigo en varias regiones agrícolas. En un análisis de Cristián Russo, jefe de Estimaciones de esa entidad, se destacó que la estimación para la cosecha de trigo es de 19,5 millones de toneladas, un millón menos de lo que se esperaba a la siembra. Además, señaló que la campaña triguera 2024/25 no recibió lluvias importantes en lo que va del ciclo, ya que septiembre ha sido inclemente con la falta de agua, y en el comienzo de octubre, el escenario no cambió.
El experto señaló que la primera estimación nacional de trigo arroja que el área que quedaría sin llegar a cosecha ya se estima en el orden de las 310.000 hectáreas. Con un área sembrada de 6,7 millones de hectáreas y la estimación de 19,5 millones de toneladas de cosecha, la Argentina lograría producir un 31% más de trigo que lo que dejó la mala campaña pasada (14,5 millones de toneladas).