El doctor José María García Mina, una de las máximas autoridades en química agrícola del mundo, contó qué viene en fertilización junto a Timac Agro y cuáles son los desafíos de la agricultura
Timac Agro, empresa del Grupo Roullier, lidera la bioestimulación y la nutrición de cultivos con una fuerte apuesta a la investigación y el desarrollo.
José Maria García Mina: «Liderazgo, innovación y tecnología potenciada que transforman la agricultura”
En Argentina, Timac Agro está presente hace más de 30 años. Y para transmitir la historia y el aporte de la empresa a la agricultura, invitaron a Jose María García Mina, uno de los químicos agrícolas más importantes del mundo que desarrolló muchos productos que hoy son una realidad en el campo.
En diálogo con Agrofy News, Garcia Mina repasó los fundamentos científicos y el proceso de creación e investigación que hay detrás de productos como TOP PHOS, DUO MAXX y FERTIACTYL GZ.
«Es muy importante una preparación de bioestimulantes que respondan a una estructura concreta y una composición química concreta que aseguren su efecto año tras año», destacó y contó su visión sobre el futuro de la fertilización. «El productor, el gran tesoro que tiene es el suelo», resaltó.
También puntualizó por dónde pasan las principales líneas de investigación actual. ¿Cómo aprovechar los nuetrientes que están en el suelo? ¿Se pueden aprovechar los residuos para fertilizar? ¿Cómo se puede defender a la planta del cambio climático? Y hasta cómo estimular el sistema de defensa de la planta y depender menos de productos químicos.
Al mismo tiempo, destacó la alta fertilidad de los suelos argentinos: «Casi sin fertilización consiguen productividades altísimas». Pero alertó que sin un manejo adecuado «probablemente estos suelos con el tiempo irán perdiendo fertilidad«.
Jose María García Mina en Argentina: satisfacción y gratitud por ver el éxito de sus creaciones
¿Cuáles son los desafíos de la agricultura y cómo acompaña Timac Agro al productor?
La verdad es que hay muchos componentes que influyen en la productividad, yo puedo incidir en aquellos en los que trabajo un poco de alguna manera, porque en cierto modo todo este contexto de cambio climático, estreses bióticos y abióticos que puede haber, problemas también de suelos en muchos casos muy ricos y muy fértiles como tenéis en estas zonas de Rosario, pero en otros casos más complicados con gran fijación de fósforo, con problemas también de materia orgánica humificada. Existen muchos aspectos y yo sobre todo he incidido en investigación desde que empecé hace ya casi 35 años cuando empecé a trabajar en investigación, he incidido mucho en todo lo que es el estudio del suelo, el estudio también del papel de la materia orgánica y de la relación materia orgánica microorganismos en el suelo, de alguna manera ver cómo influye eso en el desarrollo de la planta, en todo lo que es el desarrollo radicular de la planta, en todo lo que es también el desarrollo de la parte aérea de la planta porque es una unidad, y también cómo incide en todo lo que es la dinámica de los nutrientes, tanto desde el punto de vista de la asimilabilidad potencial de los nutrientes como también de la conservación del suelo.
¿Por dónde pasan las principales investigaciones del Grupo Roullier y Timac Agro?
El productor, el gran tesoro que tiene es el suelo, entonces en ese sentido tiene que cuidarlo y tiene de alguna forma que cuidar tanto la microbiota del suelo como la materia orgánica del suelo, como las reservas nutritivas que tiene el suelo, la textura del suelo, todo eso es muy importante cuidarlo. Y todo lo que yo he trabajado en cierto modo ha sido en este contexto, en cierto modo la dinámica de trabajo nuestra casi siempre es que desde el punto del campo los productores transmiten a mis compañeros los problemas que tienen y nosotros los abordamos en los laboratorios de investigación que tiene el Grupo Roullier. Ahora mismo hay uno muy importante en Saint-Malo (Francia), un centro mundial de innovación Roullier, que tiene 4.000 metros cuadrados y un gran número de investigadores trabajando en distintas áreas de lo que es la nutrición vegetal y la nutrición animal.
En mi caso, en mi investigación donde estoy ahora, que es en la Universidad de Navarra, de Catedrático de Química Agrícola de la Universidad de Navarra y también en el grupo Roullier, lo que hemos trabajado siempre mucho es ver cómo la materia orgánica, el humus del suelo, mejora las condiciones de desarrollo de la planta, de los cultivos, el papel que tienen en la asimilación de los nutrientes, en la protección de los nutrientes. Toda nuestra investigación ha sido sobre eso, de hecho he sido presidente de la Sociedad Internacional de Sustancias Húmicas que tiene su sede en Minnesota, en Estados Unidos y que agrupa investigadores de todo el mundo, de más de 35 países que trabajan sobre el humus, la materia orgánica del suelo, porque ese ha sido, de alguna manera, el gran tema de nuestra investigación, ver cómo la materia orgánica interviene en el suelo, protegiendo los nutrientes, favoreciendo la asimilación de los nutrientes, digamos, también interaccionando con los microorganismos y todo eso, de alguna forma, aprendiendo de todo eso, estudiando a fondo, haciendo ciencia básica, tenemos más de 250 publicaciones JRC (Joint Research Centre) y tenemos también más de 55 patentes.
Lo importante es estudiar, desde un punto de vista básico y fundamental, esos mecanismos para luego ver aquellos que sean muy beneficiosos para el desarrollo vegetal, y ver cómo los podemos implantar en productos finales que, trabajando con los mecanismos naturales, resuelvan los problemas de los productores.
¿Cómo se relacionan las algas con los insumos que ayudan a las plantas?
En Francia hay un gran número de investigadores trabajando en algas marinas, en microorganismos procedentes del mar. También en moléculas que puedan extraerse de las algas y que tengan efectos importantes, microalgas, todo eso está muy centrado en el laboratorio que hay en Saint-Malo, al lado del mar, así empezó el grupo Roullier, con el señor Roullier, y la verdad es que ahí están investigando también y desarrollando mucha investigación para, de alguna manera, lo que es la base de nuestros productos.
Nosotros no trabajamos con extractos directamente, o sea, no se puede decir que cogemos una fuente de ácidos húmicos y directamente la empleamos, o un alga marina, sino que procuramos hacer en nuestros laboratorios una selección de aquellas moléculas, o de aquella estructura húmica, que tiene más repercusión en distintas propiedades, y vamos buscando enmiendas de suelo, sabemos que hay un tipo de ácidos húmicos que favorece la porosidad, que favorece la textura, y que son distintos, porque normalmente son más grandes, son más agregados, son distintos de los que favorecen el desarrollo vegetal al interaccionar con la raíz, que suelen ser más funcionalizados, un peso molecular más pequeño, por eso es muy importante, no se puede hablar de ácidos húmicos, es como hablar de coches, hay carros para trasladar bidones de 200 litros y carros para poder correr.
Según lo que queramos hay que elegir, y eso es muy importante, es fundamental para nosotros, y eso hace que los productos bioestimulantes, o de algas, o de húmicos. Por ejemplo las algas, las algas se cultivan cada año, pero cada año tienen una composición diferente, dependiendo del medio ambiente al que han estado sometidas, por tanto, a nosotros nos interesan los principios activos que están en las algas, no el alga en sí como tal, porque el alga en sí como tal, si se emplea directamente, un año puede dar resultados buenísimos y otros años unos resultados muy inferiores, entonces en ese sentido digamos que es la investigación nuestra, ver esos marcadores de actividad que garantizan que los bioestimulantes en este caso, o los productos que utilizamos en los fertilizantes granulados, etcétera, tengan las propiedades adecuadas y tengan una uniformidad de resultados.
Ahora mismo hablando de bioestimulantes, es importante por todo el tema del cambio climático, los estreses abióticos que tienen, que acaecen por el problema del cambio climático, y en ese sentido es muy importante una preparación de bioestimulantes que respondan a una estructura concreta y una composición química concreta que aseguren su efecto año tras año, que no funcionen un año y al siguiente no.
¿De dónde nació tu pasión por la química agrícola?
Mi pasión un poquito, si se puede hablar así por la investigación en química agrícola y en temas de agronomía, ha venido también con el estudio y con las circunstancias, o sea yo era un químico que trabajé en química orgánica y bioquímica, en cierto modo temas un poco diferentes, aunque con mucho paralelismo con lo que te encuentras en el suelo, que es química inorgánica también, y en cierto modo digamos que yo cuando empecé, empecé haciendo investigación sobre granulación, la formación de los gránulos para mejorar calidad, para mejorar y para poder granular equilibrios NPK muy difíciles de granular, en aquel momento cuando yo empecé, muy altos en nitrógeno, etcétera, mi investigación fue más de granulación en la empresa, en el Grupo Roullier.
Después pasé a la fábrica y pasé al control de producción y digamos al trabajo de laboratorio y eso fue para mí extraordinario, porque me permitió de alguna manera conocer en profundidad cómo se fabrican los productos y eso te da una información altísima, buenísima, para luego tú imaginar aquello que estás investigando, aquella molécula que quieres introducir para proteger el fósforo, aquellas cosas, sabes dónde poder ponerlas dentro del sistema de fabricación.
Y la importancia que el grupo Roullier da a la investigación, porque yo no soy un investigador de la Universidad de no sé dónde, que me han invitado en Argentina a venir aquí a hablar, no, no, yo soy del grupo Roullier desde los 26 años. En ese sentido digamos que es importante, porque pone de manifiesto la importancia que Roullier, siempre ha dado el señor Roullier a la investigación, a la diferencia, a la eficacia de los productos, porque no vale sólo con buscar argumentos diferentes, sino que tienen que responder a la realidad y luego funcionar para que el balance para el productor sea positivo y haya ganancia.
Y luego por otro lado pues también el hecho de cómo la libertad que también hay dentro del grupo para afrontar ideas, está el problema que te plantean, pero tú puedes tener ideas nuevas, hipótesis nuevas, unas funcionan, otras no funcionan, pero dan lugar a una investigación generada por el grupo Roullier, que da lugar también en una investigación aplicada y a una, digamos, cristalización de todo eso en productos materialmente contantes y sonantes, hechos a nivel industrial, a escala industrial, y digamos de alguna manera yo he venido también un poquito para explicar eso, en productos como el TOP PHOS o el DUO MAXX® o productos como el FERTIACTYL GZ, pues demostrar un poquito a la gente de la empresa y también a veces asesores que vienen, etcétera, que detrás de esos productos hay una historia de investigación, que cada paso que se da en las propiedades que demostramos en los productos, detrás ha habido una investigación, pero no una investigación porque yo lo diga delante de ellos, sino porque está mostrada por publicaciones científicas en las mejores revistas sobre esos temas que han ido justificando.
Y luego están las patentes, que protegen las invenciones y los procesos, lo que hace que estos productos sean únicos.
José María García-Mina está en la lista de los científicos más prestigiosos del mundo.
¿Cómo ves el futuro de la fertilización de los cultivos y de la agricultura?
Nuestros productos, al utilizar productos naturales, el humus, etcétera, son muy respetuosos con el medio ambiente. Y el tema del medio ambiente es fundamental, entonces resulta que hay temas que están ahí y que son las reservas de fosfato, por ejemplo, que hay reservas de fosfato, hay minas de fosfato en muchos sitios, En el norte de África, en Estados Unidos, China, en muchos sitios, pero bueno, las reservas conocidas tienen un volumen concreto y el consumo anual es muy alto. Y en el caso del fosfato, por ejemplo, se sabe muy bien que hay fracciones de fosfato del aplicado en el suelo, hay cantidades muy grandes, toneladas y toneladas de fosfato, que están o en formas insolubles, porque se han retrogradado en el suelo, o en formas orgánicas, porque se han transformado en fosfato orgánico, no porque el fosfato sea orgánico, sino porque está ligado a moléculas orgánicas con enlaces covalentes, etcétera, entonces, claro, ahí llega un momento en que toda investigación que sea capaz de revalorizar todo ese fósforo que está en el suelo, ya sea el orgánico, ya sea el inorgánico retrogradado, es fundamental, porque tenemos que reutilizar esos nutrientes que están en el suelo.
Por otro lado, están también los residuos, la economía circular. Es verdad que el tema de economía circular es un tema como muy bonito, bien, tiene mucha prensa, es atractivo, porque además tiene un fundamento, por supuesto, pero ahí está, si tú cuentas las toneladas de fósforo, nitrógeno, potasio que hay en las toneladas de residuos limpios, ya no te digo residuos de ciudad o cosas por el estilo, sino residuos limpios de producción de hortalizas, de producción de cereal, de producción, hay tal cantidad de nutrientes que es necesario también desarrollar tecnologías que sean capaces de ponerlos a disposición de la planta, como fertilizantes, porque me dirás, no, si ya se usan, se usan como enmiendas de suelo, muchas veces el agricultor no tiene en cuenta los nutrientes que están, porque sabe que tardan mucho en ser disponibles, hay que desarrollar tecnologías y en eso el Grupo Roullier, el señor Roullier, pues tiene una prioridad importante y estamos trabajando mucho en esta investigación, que yo creo, empalmando con lo que tú has dicho, es un tema de futuro dentro de nuestro mundo de la fertilización, pues muy importante.
Luego también está el tema de cómo ayudar a los cultivos frente a los estreses abióticos de calor, falta de agua, etcétera, que con el cambio climático digamos, está presente. Todo lo que es investigación en cómo luchar contra el problema de los estreses abióticos, que se llaman así porque no intervienen en patógenos, es también muy importante, ahí tienen una labor importante los bioestimulantes. Pero los bioestimulantes fabricados con seriedad, que tengan un fundamento científico y que tengan sobre todo un control de calidad para asegurar una uniformidad de resultados.
Luego otro tema muy importante también, ya que los nutrientes son limitados, excepto algunos, como el nitrógeno, etcétera, que lo sacas del aire y por tanto, pues tienes una disponibilidad bastante alta, pero potasio, fósforo, eso es mucho más limitado, entonces, en ese caso también tiene importancia mejorar en la planta el uso eficiente de los nutrientes, que desde el grupo Roullier va por dos vías. Primero, realizar investigación para proteger los nutrientes de los bloqueos en suelo mediante la formación, en nuestro caso, de complejos concretos de carácter iónico en algunos productos o en el TOP PHOS, carácter covalente del fósforo con sustancias húmicas a través de puentes metálicos, etcétera, que lo protege de la retrogradación, de la reacción para que precipiten en el suelo y también provoca en la planta un incremento del uso eficiente, porque la planta ya no toma el fósforo en forma ionizada, lo está tomando complejado, con lo cual tiene que descomplejarlo, para eso tiene que emplear energía y cuando tiene que emplear energía, la planta se prepara para emplear la mínima energía necesaria, por tanto, una manera de emplear la mínima energía necesaria es precisamente ese fósforo que le cuesta una energía, aprovecharlo al máximo en el interior de la planta para que con menos fósforo se haga el cultivo bien.
Hay un tema también que es estimular el sistema de defensa de la planta, porque cada vez se están reduciendo más los agroquímicos a poder aplicar, en algunos países antes que en otros y más que en otros, y por tanto moléculas que sean capaces no de destruir el patógeno, no atacan al patógeno, no lo destruyen, pero estimular el sistema de defensa que tiene la planta, que tiene un sistema de defensa como tenemos nosotros, muy complejo, muy eficiente, aunque diferente del nuestro, es también importante y por tanto toda investigación en esas moléculas que estimulan el sistema defensivo de la planta, que es de un punto de vista preventivo, consigue que la planta se desarrolle en presencia de estos patógenos, la verdad es que también es otra investigación de futuro importante.
¿Qué te genera ver productos desarrollados en el laboratorio ahora en el campo argentino?
Ver productos como el FERTIACTYL GZ, como el TOP PHOS, y otros que gracias a Dios están resultando muy bien en Argentina, me genera dos sentimientos. Uno, un sentimiento de satisfacción de que la investigación que has desarrollado ha dado lugar a productos que luego en el campo responden como tú dices que van a responder.
Incluso te encuentras condiciones en las cuales está respondiendo mejor de lo que tú mismo esperabas y eso es una satisfacción. Y lo otro es gratitud, porque todo esto es gracias a aquella parte de la empresa que está en relación directa con el productor, lo que llamamos ATCs (asesor técnico comercial) que son ingenieros agrónomos, que hay más de 140 en Argentina, en España hay más de 250, en Brasil hay 1.200.
Estas personas también son las que facilitan fundamentalmente que estos productos se expliquen al productor, que el productor lo sepa usar y que le dé buenos resultados.
¿Qué nos podés contar del FERTIACTYL GZ?
El GZ responde a una acción sinérgica de una fracción citoquímica, una fracción de glicinabetaína, sustancias húmicas, digamos, que están seleccionadas, preseleccionadas, que trabajan de forma sinérgica. Lo importante es la sinergia, importante es la selección del ácido húmico, por ejemplo, para elegir los tamaños adecuados para activarlos, hay un proceso de activación patentado para que sean mucho más eficientes, la glicina betaína está protegida por el ácido húmico de los procesos de degradación en el suelo, la ceatina son extractos procedentes de algas marinas, pero que se han concentrado mediante procesos de filtración para que sean ricas en estas moléculas naturales con acción citoquinínica.
Y ese conjunto sinérgico nos da el efecto que tiene el GZ, que para mucha gente es bastante sorprendente muchas veces, y yo he de reconocer que es un producto relativamente antiguo, pero que no he podido cambiarlo, o sea, nadie de la red comercial del Grupo Roullier quiere cambiar el GZ, porque funciona muy bien, porque dan muy buenos resultados y no quieren oír hablar.
En España se han hecho también unas transformaciones, pero el GZ sigue vivo ahí, sigue vivo continuamente. Es verdad que rejuvenece, porque nosotros cada año recibimos sustancias húmicas que nos envían de distintos países, de Australia, de Canadá, nosotros los estudiamos en el laboratorio, vemos las fracciones, vemos si están los efectores adecuados, vemos su actividad biológica con test hechos en cámara de crecimiento, en distintas plantas modelo, y eso también hace que cuando encontramos una fracción húmica que es especialmente activa de eso que nosotros queremos que sea, y que es más activa de la que actualmente tenemos, lo introducimos también y lo cambiamos, de manera que es un producto que rejuvenece también continuamente.
¿Y del TOP PHOS?
En el TOP PHOS hacemos es lo que la naturaleza hace. Cuando tienes suelos como los de Brasil, esos suelos ácidos llenos de hierro y aluminio, aquí en Argentina hay suelos extraordinariamente fértiles, pero también habrá suelos complicados, y en esos suelos en los que químicamente hablando no se justifica que hubiera fósforo en la solución de suelo, porque tenía que estar totalmente precipitado, se ve que está en forma pseudo coloidal formando complejos con las sustancias húmicas, y esos complejos con las sustancias húmicas se ve que tienen, digamos, puentes metálicos. El primero que lo intuyó fue un investigador alemán, George Gehrke, que ya está retirado, con el que yo tengo mucha relación, y la verdad es que nosotros en nuestros laboratorios hemos demostrado a distintos niveles la presencia de estos complejos, y también hemos patentado cómo introducirlos dentro del fertilizante, de forma que en el TOP PHOS el fósforo está protegido de una manera especial por la formación del complejo con calcio y ácidos húmicos. Eso lleva consigo menos retrogradación en suelo y una toma por parte de la planta que induce además el uso eficiente de fósforo, por lo que he explicado antes de la complejación.
¿Se puede decir que el Grupo Roullier es pionero?
Es bonito también ver, y eso se demuestra mirando la bibliografía, que todos los productos han tenido publicaciones científicas detrás. El Grupo Roullier es el que ha dado, digamos, el primer paso. No ha sido aplicar cosas de otros y hacer ya un producto con la información de la literatura. La información de la literatura es fundamental, te basas en ella, yo me basé en los trabajos de George Gehrke, en Alemania, pero eso lleva consigo a que tú tengas hipótesis de trabajo que luego tienes que demostrar. No se trata de decir esto, puede ocurrir esto a un producto y digo qué ocurre, no, no, no. Puede ocurrir esto, lo estudió, demuestro que ocurre y cuando demuestro que ocurre y que es así y que lo sé fabricar a nivel industrial, de manera que realmente esté en el producto que se vende, que no se quede solo en el trabajo de laboratorio, entonces en ese momento es cuando realmente, digamos, el producto tiene entidad. Y toda esa investigación en nuestro caso, en muchos casos, en todo lo que hemos hecho nosotros en mi laboratorio y lo que hace el CMI (Centro Mundial de la Innovación Roullier), está basada en la investigación propia, la investigación desarrollada por el Grupo Roullier.
¿Qué te sorprende de la agricultura argentina?
De los suelos argentinos, yo mismo en mi laboratorio voy a buscar la bibliografía de investigadores muy importantes que hay en Argentina, que lo habrán estudiado, para ver en qué radica esa fertilidad tan alta que tienen algunos suelos argentinos, que casi sin fertilización consiguen productividades altísimas y calidades tan altas. No creo que todo esté solo en la cantidad de nutrientes que tiene como reserva, no lo creo.
Yo creo que ahí hay un papel de la interacción global, microorganismos, materia orgánica y componentes minerales del suelo que explicarían un poquito esta fertilidad tan extraordinaria y sería muy bonito conocer los fundamentos, que probablemente están todos ya publicados, que yo no he tenido ocasión de estudiarlos, pero que después de esta visita voy a mirar y voy a buscar con mucho interés.
Hay suelos también de alta producción en Ucrania, en el norte de Europa, de trigo, de cereal, con mucha materia orgánica, etcétera, o sea que no es que solo sea Argentina, pero el suelo argentino en este entorno de Rosario, en Buenos Aires, es conocido por su fertilidad y realmente sería interesante conocer, más allá de lo que son las reservas de nutrientes, qué otros aspectos hay allí, poblaciones microbianas, tipo de poblaciones microbianas, cómo trabajan esas poblaciones microbianas, la materia orgánica del suelo, qué tipo de materia orgánica es, cómo interacciona con la fracción mineral, la reposición de toda esta materia orgánica y microorganismos, todo eso sería extraordinariamente interesante.
¿Hay alguna recomendación para la agricultura argentina?
Muchas veces se está produciendo en condiciones en que, por las razones que sean, por problemas económicos, por problemas que sean, yo no los conozco, pues el productor a veces no puede aplicar todo lo que tendría que aplicar y realmente, probablemente si lo hiciera, quizás las productividades no fueran mucho más altas, pero sí que probablemente lo que hace es proteger la sanidad del suelo y ese suelo que si no se le cuida y no se aplican las cosas fertilizantes, etcétera, para no sólo nutrir la planta, sino también cuidar su salud, la materia orgánica, etcétera, sin hacerlo eso, probablemente estos suelos con el tiempo irán perdiendo fertilidad. En cambio, si se cuida ese suelo, ya no es tanto por la productividad que puede subir, pero en algunos casos yo creo que muchas veces estamos al máximo de productividad de la variedad en Argentina. Probablemente la variedad de maíz o la variedad de trigo no da más, no lo sé, porque yo no soy un especialista en semillas y todo esto.
Y sin embargo sí que estamos desmejorando el suelo, quizá, si no se le acompaña al cultivo de aquellos productos necesarios para que el suelo permanezca más sano, y en ese sentido mantenga la fertilidad por más tiempo. Por eso también es importante conocer por qué es tan fértil, claro, porque si sabes por qué es tan fértil, que probablemente se sabrá perfectamente, pues tú sabes a qué tienes que incidir.
¿En qué radica la fertilidad de los suelos argentinos?
Las hipótesis que tengo, digamos, de alguna manera es la importancia de los microorganismos que hay presentes en los suelos, en estos suelos argentinos, que habría que caracterizarlos muy bien, que supongo que están caracterizados, que se podrían comparar los microorganismos y las poblaciones y las distribuciones mediante metagenómica de suelos entre parcelas de más o menos fertilidad y entonces ver un poquito si existen correlaciones, y luego también la materia orgánica, porque la materia orgánica es, para hablar de materia orgánica, es como hablar de ácidos húmicos, todo es materia orgánica, pero si no hay una adecuada humidificación de la materia orgánica y por tanto una interacción adecuada también entre los microorganismos, esa materia orgánica fresca y la textura del suelo que facilita también la aireación, la humedad y todo, pues probablemente es la interacción de la textura de estos suelos con la materia orgánica, con los microorganismos, los que están facilitando esta alta productividad.
Entonces, ¿qué tiene que cuidar el productor argentino?
Pues cuidar de aplicar cada equis tiempo materia orgánica, estiércol, no hay que buscar grandes enmiendas, utilizar estiércoles, compostados mejor, compost o fuentes de materia orgánica activas como leonarditas o turbas, luego también ver cómo está la vida microbiana del suelo, ver un poquito si conviene también aplicar estos estiércoles manteniendo un nivel de nitrógeno que le permita a la vida microbiana crecer, usar ese nitrógeno que no compita con el cultivo, luego después por el nitrógeno la vida microbiana y todo eso, digamos, de alguna forma probablemente sí ayudaría mucho a mejorar la sanidad del suelo, o productos como estos de fósforo protegidos que tenemos nosotros y que tendrán otros también, que mejoran también de alguna manera la dinámica de fósforo en el suelo, porque nosotros observamos que poniendo menos unidades de fósforo tenemos mayor cosecha, tenemos una adecuada nutrición de los cultivos. Y cuando se mide el fósforo residual después del cultivo resulta que también tenemos más, y se han aplicado productos más baratos que son commodities. Pero se retraen muy rápido en el suelo. En ese sentido se podría ayudar bastante a la agricultura argentina.