En el caso del trigo, el Panorama Agrícola Semanal (PAS) de la entidad porteña indica que ya se implantó el 73,5% de las 6,3 millones de hectáreas proyectadas, aunque esta proporción significa un retraso de 10,6 puntos porcentuales en relación a la campaña pasada.
Las lluvias que ocurrieron en algunas zonas del país permitieron activar las labores, pero a la par la sequía que se mantiene en otras regiones, como el oeste y el sur de la región pampeana, sumado a heladas que secaron el estrato superficial, han interrumpido el paso de las sembradoras.
PROYECCIONES TRIGUERAS
Tras descontar 300.000 hectáreas de su proyección inicial de 6,6 millones de hectáreas, la Bolsa de Buenos Aires considera que la demora interanual de 10,6 puntos “podría acentuarse de no revertirse el escenario de déficit hídrico, o incluso producir nuevos ajustes de la proyección de siembra”.
De acuerdo con los datos relevados, la campaña continúa atravesada por un clima predominantemente seco que afecta no solo la siembra sino el crecimiento temprano del cultivo: el 38% de los lotes ya implantados, fundamentalmente con ciclos largos a intermedios, presentan una condición hídrica entre regular y seca.
Por ahora, el daño sobre la producción esperada no es grave porque en los primeros estadios de desarrollo, los requerimientos hídricos de las plantas no son tan altos. De todos modos, de persistir el panorama actual, todas las proyecciones seguirán empeorando.
RETRASO REGIONAL
El retraso en la siembra en algunas regiones es particularmente alto: por ejemplo, en el NEA, Córdoba y Santa Fe, hay demoras interanuales de hasta 39 puntos porcentuales.
“Sobre el centro-oeste y sur del área agrícola, la intensidad y frecuencia de las heladas ha acelerado el secado de los primeros centímetros del suelo, dando lugar a demoras interanuales de hasta 12 puntos porcentuales”, añade el PAS.
Por su parte, en su informe semanal de eventos meteorológicos destacados, la Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) incluyó un reporte sobre el avance de la siembra de trigo 2022/23, en el que también advierte en relación al retraso general que se observa en esta campaña.
“Siguen sin ocurrir lluvias significativas capaces de modificar sustancialmente las condiciones para la siembra de fina. El avance es muy heterogéneo y va dependiendo, entre otras cosas, de la humedad que pudo conservarse con un adecuado manejo”, expresa el estudio.
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En comparación con las últimas cinco campañas, en 19 de las 40 delegaciones nacionales del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca el progreso es similar a la media histórica, en 10 van un poco más adelantados y hay 11 con retrasos.
Las más rezagadas, con un avance que está un 20% o más por debajo del promedio para esta época del año, son Pehuajó, Salliqueló, Río Cuarto, Cañada de Gómez, Charata y Sáenz Peña.
