El aumento de la temperatura, y las precipitaciones, favorecen el desarrollo de la fusariosis, una enfermedad destructiva de la espiga de estos cereales.

“La relevancia de este trabajo radica en que es uno de los primeros en el mundo en desarrollarse bajo condiciones experimentales de campo”, asegura Mauro Martínez, primer autor investigador del Conicet en el Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Biotecnología, quien se abocó a estudiar el impactó del incremento de tres grados centígrados en la temperatura nocturna, sobre el rendimiento, la calidad y la seguridad alimentaria de trigo y cebada.

















El Intendente Salomón, junto a la Subsecretaria de Servicios Sanitarios y Gestión Ambiental Ing. Mariela Incolla concurrió a observar los trabajos de ampliación de sectores cuadras del conducto principal del Colector Cloacal Sur en la Avenida Saavedra.


