De China a Colombia: las oportunidades del maíz argentino en el mundo

La prohibición del Diclorvós abre una oportunidad para recuperar a la Unión Europea. Además, Colombia y China se presentan como plazas atractivas.

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El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) proyecta una exportación récord de maíz por parte de Argentina

Más allá del desafío de aumentar el uso interno del cereal en línea con nuestros países competidores, el hecho de que la exportación sea el principal destino de la cosecha no deja de ser un desafío para cumplir con los exigentes requerimiento de los países de destino.

A diferencia de la soja, el maíz tiene muy diversificados sus mercados que se reparten entre más de 100 países con diferentes condiciones que el país exportador, en este caso Argentina, debe cumplir.

 

MAÍZ ARGENTINO EN EL MUNDO

En este sentido, María Marta Rebizo, Gerente de Asuntos Económicos y Comerciales de CIARA (Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina) y CEC (Centro Exportador de Cereales), realizó una presentación en la Bolsa de Comercio de Rosario en donde enumeró los desafíos para cumplir con los requerimientos internacionales en una campaña que se vislumbra como histórica.

Durante un encuentro organizado por la Asociación Argentina de Poscosecha de Granos (Aposgran) Rebizo explicó que se deben cumplir numerosos controles para la exportación de granos en materia de calidad tanto en el país de origen, que certifica el Senasa, como así también en el destino. Además pueden existir requisitos acordados contractualmente entre ambos países.

Por otro lado, están los requisitos en materia fitosanitaria: «Toda exportación de granos requiere una aprobación fitosanitaria para su traslado que puede ser distinta en función de los requerimientos del país del destino». «Cuando un país de destino no requiere nada especifico el Senasa realiza una revisión general. Pero hay otros países que requieren análisis específicos de determinadas plagas«.

Unión Europea y Japón

Rebizo explicó que hay una serie de países en los que Argentina fue perdiendo participación pero que en la nueva campaña se presentan como una oportunidad, especialmente por la prohibición que estableció el Senasa para la importación, comercialización y uso del Diclorvós (DDVP). «Esto abre una oportunidad para exportar maíz a la Unión Europea y Japón«, comentó Rebizo y agregó que también es una posibilidad para exportar sorgo a Japón y aceite de girasol a la UE.

Cada vez hay más países que reducen los Límites Máximos de Residuos de Pesticidas (LMR): «La UE fue pionera, pero se suman India, China, Japón, Corea y muchos otros más. Las empresas exportadoras deben controlar estos límites y SENASA debe controlar el efectivo cumplimiento de los LMR vigentes en Argentina y de las prohibiciones de sustancias».

De hecho, esta campaña se incluyó clausula en contratos de compra de granos estableciendo una penalidad de US$ 20 por toneladaen caso de detectarse DDVP, para entregas de granos gruesos a partir del 1/3/19.

China

Otro mercado importante para Argentina es China, pero tiene protocolos muy exigentes que requieren el control de 16 plagas en maíz y 25 plagas en el caso del sorgo de alepo. «No hemos logrado hasta el momento exportar grandes cantidades de sorgo y maíz a China», destacó la especialista de CIARA-CEC.

En sorgo el protocolo exige ausencia de sorgo de Alepo y sorgo negro, presentes en Argentina. En este sentido, Rebizo destacó que se busca negociar una tolerancia con el gigante asiático (10 semillas/100 gr). Cabe señalar que China abastece la demanda de estos granos principalmente de Estados Unidos y en el último tiempo de Ucrania.

México

Una plaza interesante para el maíz argentino es México, un mercado en la que se puede entrar sin aranceles pero que exige la certificación de 16 plagas. «Resta mejorar condiciones de acceso en materia fitosanitaria para maíz en México«, destacó Rebizo y agregó que se trata de un análisis demora 15 días y no es sencillo desviar el embarque a otro destino desde allí.

Colombia

La comunidad Andina es una organización de países que incluye a Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú y también representa una oportunidad pero se ve limitada por los aranceles: «Tenemos una barrera arancelaria que significa un obstáculo para nuestras exportaciones».

Esta comunidad activa derechos de importación cuando los precios internacionales caen. Un instrumento que fue negociado con Estados Unidos: «Los países del Mercosur no tienen esta ventaja». Cabe señalar que Colombia supo ser el principal destino de las exportaciones de maíz y se perdió luego del acuerdo con Estados Unidos, que hoy es el principal y casi único proveedor.

En este sentido, Rebizo ve una oportunidad de Negociación arancelaria: «Puede mejorar el acceso de maíz a Colombia«.

Irán

Rebizo también se refirió a los mercados importadores importantes donde quedamos afuera por cuestiones fitosanitarias. Este es el caso de Iran, una plaza en donde Brasil es un gran vendedor. «No podemos entrar por una cuestión fitosanitaría ya que solicita el análisis de un hongo que esta presente en la Argentina. Solicitan que Argentina certifique ausencia de Stenocarpella Maydis«.

MERCADOS TRADICIONALES

Además de las plazas con potencial, hay mercados que no hay que descuidar. En este sentido Rebizo destacó que Vietnam, Argelia, Arabia Saudita, Marruecos, Yemen, Emiratos Árabes, Indonesia requieren una certificación general. En tanto, Egipto solicita analizar Ambrosia sp y Claviceps, Malasia fumigación con Fosfina y Jordania fumigación con fosfuro de aluminio.

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