Este lunes el ministro de Hacienda Hernán Lacunza y su equipo de trabajo, se hicieron presentes en la Cámara de Diputados para presentar el presupuesto 2020. El documento presentado prevé una inflación que rondará el 34%, un dólar a $67 y un crecimiento del 1% impulsado por las exportaciones.
El ministro realizó un recorrido por las medias que se tomaron en 2018 y los resultados que fueron arrojando. En este sentido, remarcó que en 2018 el país sufrió perturbaciones, en parte, por la sequía más intensa de los últimos 50 años. “Afectó severamente la cosecha y deterioró las perspectivas inmediatas de uno de los principales sectores generadores de divisas de exportación”, asegura el documento que repasa el contexto general que atravesó el país.
Así como el campo sufrió su peor momento por la reducción del rendimiento debido al faltante de agua, se espera una buena campaña y el presupuesto 2020 presentado lo señala. El documento señala que las exportaciones son nuevamente el componente del PIB (Producto Bruto Interno) de mayor crecimiento, destaca que las manufacturas agropecuarias y las energéticas también mostraron una suba en cantidades, de 17,6% y 14,5%, respectivamente, en 2019.
En relación a los sucesos acontecidos en 2019, Lacunza sostuvo: “Ha habido una combinación de herencia, falencias y descoordinaciones del programa económico, factores externos como la sequía o el corte al financiamiento de los mercados emergentes”. A pesar de este escenario el Gobierno estima para 2020 un superávit comercial de más de USD 17 mil millones.
Para alcanzar este objetivo y crecer un 1%, el campo tendrá un rol fundamental. El presupuesto estima que las exportaciones aumentarán un 7%. Este incremento estará generado por una mejora en las exportaciones energéticas como consecuencia del desarrollo de Vaca Muerta y un crecimiento en las exportaciones manufactureras de origen agropecuario impulsado por la apertura de nuevos mercados de exportación.
En relación al salto que sufrió el dólar durante este año, Lacunza argumentó: “Por un lado, posiciona al país para alcanzar un crecimiento económico basado en el crecimiento de sus exportaciones, superando los recurrentes ciclos de expansión y recesión por restricción externa (falta de dólares) de las últimas décadas”. Además agregó que por otro lado, permite pensar un plan de estabilización resguardado de la amenaza siempre latente de un shock cambiario.
Ya mirando en las políticas públicas que se establecerán como eje, el presupuesto 2020 detalla que se continuará poniendo el foco en potenciar a las economías regionales y al sector agroindustrial. Además señala que se seguirá transformando de manera profunda el sistema logístico argentino, profundizar la inserción laboral, relación entre los distintos sectores de capacitación, formación y el mundo productivo.