- En cuanto a la crisis con el campo, tras la decisión concreta del gobierno de Alberto Fernández de cerrar las exportaciones hasta los nuevos anuncios, hay varias versiones circulando. Este jueves a las 16.30 hay una reunión de las organizaciones del campo con el ministro de Agricultura. Y el domingo, está el discurso de Fernández ante la Asamblea Legislativa, donde, se supone, se hará formalmente el anuncio de un aumento: del 30% que paga en retenciones hoy la soja se iría al 33%.
- Si esto es cierto, estamos en las puertas de un conflicto muy grande. Porque todo el sector agropecuario viene con muchísima presión impositiva. La soja, por ejemplo, está pagando el 94% de impuestos brutos (con el 30% de retenciones que ya tiene). También paga 94% el maíz y 97% el trigo. Esto aumentaría aún más si sube ese 3% de retenciones.
- Este es un sector que produce dólares, entonces el Gobierno va ahí porque necesita dólares. Pero, si no se lo incentiva un poco a ese sector deja de invertir y deja de gastar. Es un sector que podría darle muchos dólares al país, pero que son acaparados por el Estado y deja al sector en una situación de languidez, de decir: «vivimos con lo que hay y listo».
- Esto sería muy grave también porque venimos de una serie de ajustes a los sectores más intensivos de la economía. Se les sacaron todas las ventajas a las empresas tecnologías que también producían dólares y trabajo. El impuesto del 30% es al turismo, a la compra-venta de propiedades. ¿Con qué sector va a hacer el Gobierno crecer la economía para pagar la deuda, si está asfixiando a todos los sectores productivos más importantes del país?
- Se necesitan inversiones. ¿Quién va a invertir en la Argentina? ¿Por qué? Porque es un país con dos condiciones: una, el que invierte debe traer dólares y no puede comprar dólares. Y dos, está la carga impositiva enorme. Sin inversión no hay reactivación económica. Tenemos un largo período de mediocridad si seguimos con esto.
- Y, encima, se suma una gran lucha política con el campo. Y esto extraña en Fernández. Porque el Alberto Fernández jefe de Gabinete en la época de la crisis de la 125 decía que se arrepentía de no haber chequeado la información que le traían Martín Lousteau y Guillermo Moreno. Fernández renunció después de esa crisis con el campo porque se sintió mal en esa situación.
- La crisis de la 125 desencadena la renuncia y la decepción de Alberto Fernández con respecto al gobierno de Cristina Kirchner. Que su gobierno sea el que repita la misma situación es muy raro. Hay que ver si esto realmente será así; todos los indicios señalan que vamos hacia eso.
- Es como un déjà vu de cosas que ya hemos vivido, que no le hacen bien a la economía. Recordemos que en 2008 la soja todavía tenía buen precio y la Argentina todavía vivía de la renta de los años anteriores. El país estaba mejor posicionado.
- Ahora estamos en una situación muy difícil, el país necesita inversión y esto desalienta a los sectores más dinámicos a que inviertan, e incluso, algunos podrían irse del país. Para ser claros: si las retenciones pasan del 30% al 33%, vamos a tener una reedición de la guerra con el campo de 2008.
Fuente: La Nación por Joaquín Morales Solá