“Las economías regionales hoy tienen como un problema la capacidad de incorporar tecnologías en el proceso productivo, la cosecha, la conservación del producto y la logística“, expresó en declaraciones a la agencia Télam.
En ese sentido, dio como ejemplo el caso de las producciones de la Pampa Húmeda en la década del ’90, que incorporaron la siembra directa y las semillas genéticamente modificadas. “Como resumen, con ese paquete Argentina pasó a ser uno de los productores más eficientes de cereales y de productividad por superficie cultivada. En algunas economías regionales falta que se desarrolle ese paquete tecnológico y que los productores tengan la capacidad de incorporarlos en sus procesos productivos”, detalló.
El secretario de Alimentos, Bioeconomía y Desarrollo Regional se refirió, en esa línea, al tomate para la industria y remarcó que antes el más eficiente de los productores producía 80.000 kilos por hectárea, mientras que hoy, con un paquete tecnológico, produce entre 150.000 y 180.000.
“Eso se pudo hacer por un trabajo muy bien realizado por la cadena, los gobiernos de San Juan y Mendoza y las industrias. Cuando los productores incorporen ese tipo de tecnologías para que produzcan más, cuando se den procesos de integración horizontal y verticalmente…”, dijo.
En tanto, afirmó que todos estos procesos “hay que empezar a trabajarlos desde ahora para que rindan frutos en cuatro o cinco años”.