Según el economista Juan Manuel Garzón, del Ieral, en septiembre podrían entrar hasta US$6600 millones por el régimen especial para la venta con un tipo de cambio a $200; el año finalizaría entre todos los granos y subproductos con un aporte de US$36.900 millones.
La agroexportación terminaría 2022 ingresando un 12% más de divisas entre todos los productos.
Para todo el año, la liquidación agroindustrial alcanzaría los US$36.900 millones, creciendo un 12% respecto al 2021, según Garzón.
«De no haber nuevos cambios en materia cambiaria, es muy probable que las divisas agroindustriales que se liquiden este mes sean similares o incluso superiores a las del último trimestre. Es un dato importante que determinará los grados de libertad del BCRA para proveer de divisas a los distintos demandantes (importadores, turistas, atesoramiento, etc) en el futuro inmediato», señaló.
En su trabajo repasó que, a fines de agosto se había comercializado 36,1% de la soja 2021/22 (15,9 millones de toneladas sobre un total de 44 millones de toneladas), cuando el patrón histórico (media de las últimas cinco campañas) indicaba que, a esa fecha, debería haber estado vendida 51,4% de la producción. El rezago de 15,3 puntos porcentuales equivalía a 6,7 millones de toneladas.
Con el «dólar soja», el precio que estaba en los $52.000 por tonelada se incrementó hasta llegar a $72.000 en el arranque de la normativa para después rondar los $70.000. De acuerdo a los precios internacionales (FOB Puertos Argentinos), impuestos que se pagan (derechos de exportación), gastos comerciales y portuarios, el precio interno de paridad de exportación de la soja con el tipo de cambio diferencial debería haber estado -dijo Garzón- cerca de los $75.000 por tonelada.
Para el economista, la brecha se explicaría por el «efecto puerta 12? (mucha oferta concentrada en pocos días) y/o alguna prima de riesgo que el sector exportador trasladó a los precios internos para cubrirse por algún costo no previsto que pueda aparecer en las operaciones que se realizan bajo el nuevo esquema.
«El importante aumento del precio interno, el inicio de la siembra de los cultivos de verano, cierta perspectiva bajista en los precios internacionales, más otras medidas tomadas por el Gobierno -como la suba de tasas de interés del Banco Central para productores que mantengan un stock de soja superior al 5% de su producción-, ejercieron su efecto sobre la decisión de comercialización de las existencias y las ventas se aceleraron en forma notable en las últimas semanas», precisó.
Hasta el 14 de este mes se habían comercializado 5,9 millones de toneladas, base sobre la que Garzón aseguró que las operaciones serán «claramente récord» con 9,3 millones que a precio de exportación tienen un valor cercano a los US$5500 millones.
Además de ese escenario, planteó dos potenciales situaciones. Un escenario con ventas adicionales por 1,3 millones de toneladas, el equivalente al 50% de lo que se suele comercializar en octubre. Así se supone no solo que las ventas se ponen al día, sino que además se adelanta parte de lo que usualmente se vende el próximo mes, lo que da un total de 10,6 millones de toneladas (US$6250 millones).
Otra posibilidad es que se adicionen 2,5 millones de toneladas, un flujo equivalente a todas las ventas habituales de octubre, lo que da un total de 11,9 millones de toneladas por valor aproximado de US$7000 millones.
Vale recordar que, según lo informado por la Bolsa rosarina, hasta el 22 del actual se llevaban operadas con el dólar soja 12.162.398 toneladas.
Sergio Massa anunció el 4 del actual el dólar soja que finalizará el próximo viernes
Respecto a cómo sigue la comercialización en lo que resta del año, una referencia es el patrón histórico, con un total de 32,7 millones de toneladas acumuladas hacia fines de diciembre (74,3% de la producción).
«A mayores ventas en el presente, menor será el flujo en los próximos meses -describió Garzón-. Por caso, en el primer escenario este mes cerraría con 25,2 millones de toneladas [acumuladas en el ciclo], quedando entonces 7,5 millones para último trimestre; si el mes termina con 26,5 millones, quedarían 6,2 millones de toneladas hasta fin de año. Si se diera la última posibilidad, serían de 27,8 millones de toneladas por lo que restarían 4,9 millones respectivamente».
Sobre los saldos exportables de la campaña agrícola 2021/22 y los precios internacionales esperados, el informe del Ieral indicó que la liquidación por el «dólar soja» podría estar en un rango de entre US$5200 y US$6600 millones una cifra récord y claramente fuera del «patrón normal».
En tanto, para los próximos tres meses quedarían entre US$4600 y US$6000 millones para todo el trimestre, con una distribución mensual «difícil de anticipar, pero muy probablemente que iría de menor a mayor». En octubre la liquidación estaría entre US$1250 y US$1650 millones, se recuperaría levemente en noviembre, con entre US$1350 y US$1800 millones, y volvería a mejorar en diciembre por el ingreso al mercado de los cultivos de invierno, trigo y cebada, con US$2000 a US$2550 millones.