El Gobierno oficializó que 4571 productores recibirán un total de $5.955 millones; el dirigente rural planteó que en un país normal no haría falta
El Gobierno oficializó el listado de beneficiarios del programa Impulso Tambero. La iniciativa apunta a compensar el impacto de las diferentes ediciones del dólar soja y entrega, en esta versión, un máximo de hasta 800.000 pesos por cuota.
Dentro de los beneficiarios se encuentra un dirigente rural. El presidente de CRA, Jorge Chemes se inscribió en el programa y recibirá $ 746.758 en dos cuotas. En la primera edición del programa recibió $ 1.171.710.
Chemes es productor tambero de Entre Ríos y produce menos de 1500 litros diarios. Al ser un pequeño productor, está contemplado dentro del programa y cumple con los requisitos para recibir el aporte económico.
Agrofy News le preguntó al dirigente rural si recibir este aporte no va en contra de lo que piden habitualmente: “Va en contra, pero depende del momento que vivamos. Si tuviéramos un país normal, con una estabilidad económica relativa, obviamente que el Estado no se tendría que meter y generar condiciones para producir cada día más y que todo sea confiable”.
Este programa está destinado a establecimientos que generen hasta 7000 litros diarios. En este sentido, establece un aporte de $ 20 pesos por litro a los productores de menos de 1500 litros y de ahí en adelante paga $ 15.
Chemes comentó que la intención o la idea del beneficio no es mala, pero que el problema son los montos, que no terminan de cubrir las necesidades. Según explicó el dirigente, 8000 kilos de balanceado sale casi un millón de pesos y cubre 20 días. “Vamos a ser realistas, no alcanza para nada”, apuntó.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca informó que hay un total de 4571 beneficiarios. El monto total que se destina para este programa es de $5.955.461.699,46.
Por su parte, Chemes insistió que el productor chico es el que más sufre porque no tiene ningún tipo de herramienta y capacidad de apelar a otro sistema. Al mismo tiempo volvió sobre la participación del Estado: “Si fuéramos un país normal, esta ayuda no tendría que venir del Estado, sino de una mejor ley de emergencias y de un sistema de seguros multirriesgo. Como no somos normales, ocurre lamentablemente todo esto que estamos planteando”, apuntó.
Por último, planteó: “Todas estas herramientas, cuando se aplican mal, terminan siendo malas soluciones. Ahora, cuando se hacen bien, evidentemente pueden tener y generar una ayuda importante como puede necesitar el productor”.