Los nuevos aranceles impuestos por Estados Unidos generan presión sobre los activos argentinos y afectan la estabilidad financiera.

Mientras los mercados reaccionan con caídas, algunos analistas ven en el horizonte una posible oportunidad para las exportaciones nacionales.
Los nuevos aranceles impuestos por Estados Unidos generan presión sobre los activos argentinos y afectan la estabilidad financiera. Mientras los mercados reaccionan con caídas, algunos analistas ven en el horizonte una posible oportunidad para las exportaciones nacionales.
Impacto inmediato en los mercados argentinos
La decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer nuevos aranceles del 25% a las importaciones provenientes de México y Canadá, y del 10% a las importaciones desde China, ya se siente en los mercados internacionales y en particular en Argentina. Analistas coinciden en que la medida presiona a la baja los bonos y acciones del país, generando un impacto inmediato en su valuación.
Este lunes, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció un acuerdo con Trump que pospone por un mes la aplicación de los aranceles mientras ambas naciones negocian una solución de fondo. Sin embargo, no hubo novedades sobre posibles concesiones a Canadá y China, lo que mantiene la incertidumbre sobre el impacto global de esta guerra comercial.
Según el economista Fernando Marull, la reacción esperada es una caída del índice Merval y de los bonos argentinos, junto con una suba en el tipo de cambio. No obstante, matizó que la relación entre Javier Milei y Donald Trump podría generar un escenario distinto para Argentina, considerando la afinidad ideológica entre ambos mandatarios.
«El ‘Trump Trade’ puede ser una oportunidad para el país si se generan nuevas vías de exportación, aunque eso será a largo plazo y no de inmediato», sostuvo Marull.
Mercados en rojo, commodities en alza
A las 12:58 (hora de Buenos Aires), el índice Global X MSCI Argentina (ARGT) caía un 1,9% en Wall Street, contrastando con los avances del Global X MSCI Colombia y del iShares MSCI Brazil. A su vez, los bonos soberanos argentinos en dólares mostraban pérdidas de hasta el 0,8%.
Entre los ADRs más negociados, YPF retrocedía un 1,6%, mientras que Grupo Financiero Galicia (GGAL) registraba una baja del 2,4%.
Por otro lado, los futuros de soja y maíz mostraban subas del 1,1%, mientras que el gas natural saltaba más de un 9%. Estas commodities son clave para la balanza comercial argentina, lo que podría generar un mayor ingreso de divisas si los precios mantienen su tendencia alcista.
Desde el Ministerio de Economía, Luis Caputo reafirmó que «el mejor antídoto» frente a estos cambios es la disciplina fiscal y monetaria: «Nuestro compromiso es no movernos ni un centímetro del orden que hemos implementado desde el primer día».
Argentina y los emergentes en la mira
El panorama para los mercados emergentes no es alentador. Según Marull, el efecto inmediato de los aranceles será un aumento en la inflación estadounidense de aproximadamente 0,5 puntos porcentuales, lo que podría afectar las tasas de interés de la Reserva Federal.
Esto a su vez impactaría en el riesgo país argentino, que actualmente se ubica en 618 puntos básicos. Un encarecimiento del crédito internacional podría complicar futuras emisiones de deuda para Argentina.
El economista Orlando J. Ferreres advirtió que «los mercados reaccionarán con rigidez al incremento de los aranceles, lo que traerá consecuencias en el comercio internacional y mayor inflación en los países más afectados».
Además, Ferreres señaló que la suba en los precios de la soja y el petróleo es una respuesta directa al contexto inflacionario que podría derivarse de la guerra comercial. En este sentido, advirtió que «si bien enero cerró con un IPC del 2,4%, podría haber un repunte en febrero».
Milei y Trump: una relación estratégica
La relación entre Javier Milei y Donald Trump podría ser clave para Argentina en este escenario. Según el analista Federico Vaccarezza, la sintonía política entre ambos podría traducirse en un respaldo financiero de Estados Unidos en organismos de crédito internacionales.

«El vínculo entre Trump y Milei es muy positivo. Estados Unidos es hoy el principal destino de exportaciones argentinas, desplazando a China, y es un aliado fundamental para obtener financiamiento y sostener la estabilidad del proyecto económico», explicó Vaccarezza.
No obstante, el politólogo chileno Gilberto Aranda matizó esta visión, advirtiendo que si bien ambos mandatarios comparten posturas en el plano cultural y político, sus modelos económicos son divergentes.
«Trump está impulsando una política de proteccionismo comercial mientras Milei busca abrir la economía. En términos comerciales, no están alineados», comentó Aranda.
A pesar de esto, se espera que el apoyo de Estados Unidos a Argentina en negociaciones con el FMI se mantenga, ya que el eje de la relación bilateral no se centra exclusivamente en el comercio.
¿Un nuevo mercado para las exportaciones?
A mediano y largo plazo, algunos analistas sugieren que la guerra comercial de Trump podría abrir oportunidades para Argentina como destino de inversiones y proveedor de productos que actualmente se importan desde México, Canadá y China.
Marcelo Elizondo, consultor en negocios internacionales, indicó que «si las políticas de Trump se sostienen en el tiempo, Argentina podría negociar acuerdos para incentivar inversiones y abastecer a Estados Unidos con productos que hoy provienen de otros mercados».
Sin embargo, aclaró que el impacto inmediato es limitado, ya que «Argentina no exporta la mayoría de los productos que hoy vienen desde México, Canadá y China». Aun así, destacó que algunos sectores, como las economías regionales y la cadena alimenticia, podrían beneficiarse.
Elizondo también resaltó que la «relación privilegiada» entre ambos gobiernos podría atraer inversiones orientadas a abastecer el mercado estadounidense.
La guerra comercial iniciada por Trump agrega presión sobre los mercados emergentes, y Argentina no es la excepción. Mientras el corto plazo presenta riesgos financieros y caídas en activos, algunos analistas vislumbran oportunidades para el país en el mediano plazo.
La relación entre Milei y Trump podría ser un factor clave para amortiguar los efectos negativos de este nuevo escenario, aunque el margen de maniobra dependerá de las negociaciones internacionales y de la evolución de los mercados.
Por ahora, el desafío para Argentina será sostener la estabilidad económica y encontrar una estrategia para convertir este panorama incierto en una ventaja competitiva.